El cuerpo de Jesús está envuelto con una sábana blanca y es cargado por dos hombres, quienes se inclinan para depositarlo en su sepulcro, que es un hueco en el piso y a un lado está la tapa de piedra, sobre la cual está la corona de espinas de Jesús, un hombre viste túnica blanca con una faja roja en la cintura y el otro viste pantalón azul con camisa roja. Atrás se ve María abriendo y estirando sus brazos hacia Jesús y San Juan está abrazándola, La Virgen viste túnica amarilla, velo blanco y capa azul y San Juan túnica verde y capa roja. El fondo es el interior de la cueva o sepulcro.