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Pila o Fuente de la Reina
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000793
Estado, Municipio, Localidad
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
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Contenidos
1.-ANTECEDENTES
La fuente llamada de la reina, de Chiapa de Corzo es la más grandiosa de cuantas quedan en pie de las construidas durante el siglo XVI en el territorio de México. En realidad no quedan muchas de aquella época, sobre todo de calidad notable; podemos mencionar la de Tochimilco en Puebla y otra muy grande con arcos ornamentales que existió en Texcoco. En Ocuituco, en Morelos, queda la fuente de los leones en el patio del convento, otra más en la plaza y unas especie de sirenas que arrojaban el agua por los pechos, como símbolo de fecundidad, que pertenecieron a una fuente primitiva. Entre estas fuentes monumentales debemos recordar la del patio del convento de Santo Domingo de Oaxaca que también llevaba columnas y, posiblemente, arcos o alguna viguería por la parte superior, aunque seguramente era ya del siglo XVII.
¿Por qué se hacían tan importantes y de arquitectura tan cuidada las fuentes? La introducción del agua potable evitaba las enfermedades de carácter endémico, sobre todo en climas cálidos como el de Chiapa de Corzo. En aquellos tiempos no llegaba el agua potable a las casas, y la fuente, además de proveer el precioso líquido era el punto de reunión de los habitantes del lugar, particularmente de la mujeres que acudían a ellas con sus cántaros. Todavía hoy, en algunas regiones del sureste de México, al atardecer, se reúnen, en la fuente o en el pozo.
Debido a la importancia que el agua tiene para la vida humana, el centro de las poblaciones contaba con una fuente en su centro, en la misma plaza mayor que era el lugar del mercado, de impartición de justicia y del edificio religioso. La fuente no solamente era necesaria sino indispensable y llevar el agua hasta ella implicaba grandes trabajos de ingeniería hidráulica. Acueductos a veces de gran longitud, depósitos y cajas de agua, sifones, pozos y norias, en fin, que al establecer una población, uno de los servicios necesarios era la conducción de agua potable y que no bastaba con satisfacer la necesidad puramente física de su suministro sino que, además, el arte engalanaba los lugares con obras, a veces magníficas, de arquitectura. Es el caso de la fuente o pila de Chiapa de Corzo.
Ahora bien, en la actualidad, estas construcciones han perdido su función práctica y son consideradas, únicamente como monumentos. Deberíamos hacerlas funcionar de nuevo con los sistemas físicos de conducción de agua con que fueron creadas, dándoles preferencia sobre los procedimientos mecánicos que utilizamos en la actualidad. Sería agradable disfrutar, además de la belleza plástica del monumento, de la vista de los surtidores, del frescor que proporcionan y del sonido del agua, porque estos elementos también forman parte de una fuente.
2.-EMPLAZAMIENTO
Chiapa de Corzo se ubica a 15 kilómetros de la capital del Estado de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, por la carretera que va a San Cristóbal de Las Casas, de la cual la separan 68 kilómetros. Señalaba el término del terreno llano y el comienzo de las montañas. Se encuentra ubicada la ciudad a la orilla del río Grijalva antes de su entrada al cañón del Sumidero. Hoy en día, el río ha ensanchado su cauce porque forma parte del vaso de la presa de Chicoasén que se localiza en la otra punta del cañón del Sumidero. De esta manera, Chiapa de Corzo se encuentra en zona de colinas suaves antes de que empiece la fragosidad de la sierra de los Altos de Chiapas. No se ubica en terreno totalmente plano aunque la plaza principal del lugar y el edificio de los dominicos si lo estén, igual que lo está el centro antiguo de la población.
La plaza mayor de Chiapa de Corzo es rectangular, de enormes dimensiones, el elemento más importante de ella es la fuente de la reina, llamada así porque su forma recuerda la de una corona. Tuvo por compañera una gigantesca ceiba, situada en la misma plaza. Según la pluma del licenciado Saraín V. López, a quien se debe el paralelismo entre la fuente y una corona real, fue testigo elocuente de nuestra vida de más de tres siglos, ha presenciado las vicisitudes de nuestro pueblo. . . En todo su conjunto están impresas la historia y la leyenda de Chiapas. Con respecto a la reconstrucción de la fuente, expresaba el escritor chiapaneco: . . . Ella enseñará a las futuras generaciones como nos enseña a nosotros, el poder del esfuerzo humano. De esta manera la ceiba era símbolo de la naturaleza, y la fuente, de la constancia y de la inteligencia del hombre.
Como las construcciones de las calles que dan a la plaza son de un solo piso de altura, con portales en varios de sus lados y la fuente se cubre con una amplia cúpula, resulta más alta que los demás edificios y resalta como centra del paisaje urbano. La plaza mayor, en su costado sur tiene portales que dejan paso en el centro hacia la antigua construcción de los dominicos, el convento de Santo Domingo, que no da, por tanto, directamente sobre la plaza.
El emplazamiento de la ciudad de Chiapa de Corzo se efectúo en un llano a orillas del río, una legua del sitio que tenían antes que es el pueblo que preservara hoy nos dice Remesal en la obra citada que fue escrita entrado el siglo XVII. Allí se llevó a los sobrevivientes de la antigua Chiapa, que si atendemos al cronista Bernal Díaz del Castillo, verdaderamente se podía llamar ciudad, y bien poblada, y las casas y calles muy en concierto, y de más de cuatro mil vecinos, sin otros muchos pueblos sujetos a él que estaban poblados a su alrededor.
3.-HISTORIA
La Historia General . . de Chiapa y Guatemala, escrita por fray Antonio de Remesal nos informa textualmente que A los de Chiapa se les añadió otra ocasión de contento, y alegría en el fin del oficio de la fuente que está en medio de la plaza, que es uno de los buenos y bien trazados que hay en todas las Indias, trazóle y comenzóle el padre fray Rodrigo de León, y en ausencia suya le prosiguió un español hasta echarle este año de 1562 el agua. Y como los indios la viesen subir en alto, tuviéronlo al principio por un milagro tan grande que los viejos se hincaron de rodillas, y se daban golpes en los pechos, como quien vía cosa divina. Es natural que los surtidores asombraban a quienes no conocían los estudios de hidráulica de la cultura occidental.
Dio servicio durante largo tiempo y para fines del siglo XIX, no sabemos desde cuando, se hallaba en ruinas, se había interrumpido el caño que llevaba el agua hasta ella y se habían derribado dos de sus pilastras, según explica Saraín V. López. Debieron de ser dos de los contrafuertes exteriores porque de otra manera se hubiera venido abajo la bóveda y hubiera sido muy difícil reconstruirla. El salvamento de la pila fue efectuado por los habitantes de la ciudad, que aportaron tanto dinero como materiales y trabajo, unidos por el presidente municipal de Chiapa, Don Sabel M. Orozco; la obra se ejecutó en seis meses, fue acabada en junio de 1919. en que fue celebrada con inusitado entusiasmo la entrada del agua en la Pila ya reconstruida, que desde entonces volvió a la vida y habló en el lenguaje murmurante de sus aguas cristalinas.
En nuestros tiempos la pila no trabaja y en tiempo de secas la plaza es un páramo. ¿No valdría la pena reconstruirlas plenamente, fuente y plaza?
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
La fuente de la reina de Chiapa de Corzo es de planta octagonal, tiene la pila en el centro, también de ocho lados, con un vaso central elevado sostenido por una pilastra. El agua del vaso central caía a la pila propiamente dicha. Desde este lugar, por conductores ocultos, llegaba el líquido a los cuatro depósitos que, en cuadro, se halla alrededor de la pila central, a nivel más bajo que aquella. Debía de tener rebosaderos, porque el agua era corriente aunque desconocemos la utilidad de esta agua sobrante.
El agua potable para alimentar la Pila de Chiapa era llevada por un acueducto de cinco kilómetros y cuatro alcantarillas, de manera que, como ya hicimos notar, la obra de la fuente implicaba el término de una labor mucho más amplia que la que aprecia quien simplemente admira la arquitectura del edificio.
La función de la fuente también era mayor que la que posee en la actualidad, pero estas cualidades de uso práctico son comunes a cualquier fuente de cualquier lugar del mundo. Lo que hace excepcional a la fuente de Chiapa de Corzo es la calidad de su arquitectura, que acentúa el uso y lo dignifica; es la estructura superior que cobija el depósito acuífero la más importante
En torno del depósito central y tomándolo como centro geométrico, se desarrollo la estructura del edificio en dos octágonos concéntricos en planta. La estructura es una cúpula semiesférica sobre ocho pechinas, las cuales descansan sobre otros tantos pilares que componen el primer octágono. De la parte superior de cada uno de ellos sale un arco botarel cuyos pilares respectivos dan lugar al octágono exterior del inmueble. Queda así la cúpula perfectamente apoyada en vertical y perfectamente estribada por los contrafuertes botareles del exterior. Junto al botarel del vértice del noroeste existe un cilindro construido, que contiene una escalera de caracol para subir a los techos. Y es que los techos son, a su vez, receptáculo de agua de lluvia que, seguramente alimentan un depósito inferior que debe tener la pila, el cual no se ve desde fuera. Esto dice la lógica constructiva del edificio aunque la existencia del depósito inferior debe ser comprobada mediante calas arqueológicas.
El volumen exterior de la pila se forma por un prisma rectangular de planta octagonal en lo alto del cual queda inscrita la cúpula; cada una de las caras del prisma está perforada por un arco de medio punto. De cada una de las ocho aristas del prisma, surge hacia el exterior un arco de un cuarto de círculo que es el que transporta a los pilares exteriores, y éstos al terreno, los empujes de la cúpula central.
Todo el conjunto descansa sobre una plataforma que le sirve de basamento, es también de ocho lados, con escalonado de mayor altura en la plataforma central, que tiene los cuatro depósitos de agua mencionados.
El perfil del edificio es almenado con dieciséis almenas gruesas, ocho sobre los vértices del octágono exterior y ocho en los del interno; otras dieciséis almenas de menor tamaño se ubican por pares, uno sobre cada tramo horizontal superior de los arcos botareles. Se complementa este juego de remates superiores con la linternilla ciega de la cúpula y con los resaltos de la escalera de caracol.
El edificio fue construido con ladrillo de fabricación especial, y la ornamentación que hoy observamos se consigue con el ajedrezado que conforman las piezas. Entre ellas destacan las de forma de punta diamante, que es un elemento ornamental característico de la arquitectura novohispana del siglo XVI. Antiguamente, la fuente tenía ajaracas como motivos ornamentales, hay una fotografía de ellas en el Vocabulario Arquitectónico Ilustrado que publicó la Secretaría del Patrimonio Nacional. Hoy se han perdido, físicamente, dichos vestigios.
5.-BIBLIOGRAFIA
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Pila o Fuente de la Reina