Nombre del Inmueble
San Juan Chamula
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-001467
Estado, Municipio, Localidad
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-001467
Contenidos
1.-ANTECEDENTES
San Juan Chamula es una localidad del estado de Chiapas de la cual hay abundancia de escritos. Debido a la gran personalidad del pueblo chamula y a su proximidad a la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, es accesible para el investigador y hasta para el curioso. El aspecto que más ha interesado en la época moderna es el etnográfico; de tiempos anteriores se relata el caracter guerrero de sus habitantes, que quedó manifiesto desde los momentos mismos de la conquista. Es así como Bernal Díaz del Castillo menciona a Chamula como uno de los pueblos que ofrecieron la paz al capitán Luis Marín después de las batallas que libraron los españoles contra el pueblo de Chiapa. Cabe recordar que Chiapa de los Indios, la actual Chiapa de Corzo, y Chiapa de los Españoles, la actual San Cristóbal de Las Casas dieron el nombre a la región o provincia y al estado de la federación.
También nos explica Bernal que originado en los desmanes de un soldado español contra los chamulas, estos se levantaron contra los españoles por lo cual marchó el ejército contra la fortaleza chamula ...Tenían entonces las casas e pueblo de Chamula en una fortaleza muy mala de ganar, e muy honda cava por la parte que les habíamos de combatir, e por otras partes muy peor e más fuerte ... tenían hechos unos mamparos y almenas estaban sobre mil lanceros en los puestos para la defensa de los que los probamos entrar, no encontraban como entrar a la fortaleza y para ello hicieron máquinas de guerra -ingenios, decían ellos- que fueron destruidas, en un principio, por los chamulas. Fue el mismo Bernal Díaz el primero en entrar al recinto fortificado y esto le valió la concesión en encomienda del pueblo de Chamula que disfrutó por más de ocho años, En aquella sazón -nos dice- no estaba poblada Ciudad Real, que después se pobló e se dió mi pueblo para la población.
Vemos que desde el siglo XVI la relación entre San Juan Chamula y San Cristóbal de Las Casas ha sido constante, las más de las veces para complementarse en una economía regional, y, alguna otra, para luchar entre sí. Lo cierto es que el constituir el centro de la región de los Altos de Chiapas implica una interdependencia de las localidades que las componen, hasta el punto que es inconcebible una de ellas sin el concurso de las otras y esta relación puede ampliarse a las demás localidades de la comarca.
2.-EMPLAZAMIENTO
Para tratar este tema nos basaremos en el estudio de Ricardo Pozas Arciniega titulada Chamula y en la obra San Cristóbal de Las Casas y sus alrededores. publicada recientemente por el patronato Fray Bartolomé de Las Casas de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, en Chiapas.
San Juan Chamula se sitúa a ocho kilómetros de San Cristóbal de Las Casas en dirección noroeste; entre veinte minutos y media hora en automóvil por una buena carretera que termina en la parte alta del pueblo; desde allí baja una calle recta, hacia el pequeño valle donde se asienta la plaza cívica y el templo cuya advocación es la de San Juan Bautista. Frente a la iglesia y la plaza se sitúa una fila de tiendas; por lo demás el caserío no forma calles y está disperso en forma irregular combinando sistemas tradicionales de construcción: madera, adobe y palma, con otros modernos que destruyen el entorno. En la ciudad cabecera del grupo chamula viven los representantes del pueblo, con su familia, uno por cada una de las localidades, que se encuentran esparcidas por todo el territorio. Allí habitan también las autoridades. Cuando cesa el cargo, el hombre con su familia regresan a su paraje, situado en los mismos terrenos de labor. De manera que San Juan Chamula es el lugar desde donde se gobierna al grupo, se imparte justicia y se efectúan las ceremonias comunes, tanto de festividades como de cambio de autoridades. En este sentido se acepta que aquí sobreviven tradiciones prehispánicas de acuerdo con cuya organización que pudieran haber existido algunos de los llamados centros ceremoniales anteriores a la llegada de los españoles.
Los centros de reunión y de convivencia del grupo chamula son la plaza pública, el atrio del templo y la iglesia misma. Cualquier suceso de importancia en la comunidad tiene repercusión en la plaza, en la cual conviven la organización tradicional y la moderna de municipio. La presidencia municipal, el mercado y la escuela se sitúan a un lado de la plaza. Pero el centro de todo es la iglesia porque cobija la imagen del santo patrón de los chamulas que es San Juan Bautista.
La arquitectura del centro ceremonial se corresponde perfectamente con estas jerarquías. La plaza pública se relaciona con el exterior por medio de las dos calles paralelas, que enmarcan el núcleo central del pueblo, más allá está el campo, o sea, el territorio chamula. En ella se imparte justicia y se hace la reunión dominguera; hasta ella llega el mercado.
La plaza pública tiene situadas en su entorno diversos grupos de cruces pintadas de verde, cada uno de ellos representa uno de los barrios.
El atrio del templo está bardado y tiene tres puertas, una al frente y una hacia cada uno de los lados; tiene también un kiosco que no interrumpe el eje central longitudinal de toda la composición.
Rasante a un costado del atrio se encuentra la fachada de la iglesia. Recorres el eje central de la composición es marchar, desde el campo abierto a un vestíbulo externo que es el atrio, para ya dentro del edificio alcanzar, en su fondo, el santuario, culminación y centro de la organización chamula.
En torno de la iglesia y de la plaza surgen las pendientes de las colinas, salpicadas de casas, hasta llegar la vista a las alturas no habitadas de los cerros.
3.-HISTORIA
El edificio actual del templo de San Juan Chamula no parece muy antiguo aunque no sabríamos precisar la fecha de su construcción. En estos rincones de los altos de Chiapas pareciera que el tiempo ha quedado retenido porque no están sujetos a los cambios y modas formales de otras ciudades más transitadas. La arquitectura religiosa tradicional conserva una serie de elementos, los mismos desde el siglo XVII hasta prácticamente nuestros días; desde luego que existe variación de matices pero el esquema general es constante. Estos matices llegan a ser tan sutiles que es imposible precisar si se trata de un cambio de estilo o la supervivencia de algún elemento formal tomado de otro momento histórico.
Cuando llegamos a San Juan Chamula y vamos bajando la cuesta hacia el centro del pueblo, aparece a nuestra derecha la ruina de un templo abandonado; delante de él se halla el cementerio. No hemos encontrado documentación acerca de la coexistencia de dos templos en la localidad y, en cambio, las noticias son coincidentes en cuanto a la importancia de un santo patrón, sólo uno, en la localidad. ¿Podríamos deducir que se trata de un templo anterior dedicado al mismo San Juan Bautista, antes que se edificara el actual? No lo sabemos.
Lo que si conocemos por el cronista dominico Antonio de Remesal es que en el siglo XVI existió casa conventual en San Juan Chamula y por lo tanto iglesia, para la casa conventual edificó fray Pedro de la Cruz una escalera de caracol, la primera de la provincia, en el año de 1562, y hoy no hay ninguna escalera de caracol en la casa conventual del lugar. El dato es suficiente para apreciar la antigüedad del templo de Chamula aunque según vemos, hubo varios edificios anteriores al actual.
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
Describir las partes principales de la iglesia de San Juan Bautista sería repetir el arquetipo regional de tres espacios diferenciados en presbiterio, nave y coro con sotocoro, el esquema tradicional que persiste por costumbre. Aquí y en tantos otros edificios religiosos no se explica uno la utilidad práctica del coro, siendo que están totalmente fuera de servicio, y es muy probable que siempre lo hayan estado; En San Juan nunca hubo convento -nos referimos al edificio actual-, ni siquiera una escalera adecuada para ascender al coro con facilidad. Lo interesante de esta sección del edificio es que conserva la pila bautismal en el sotocoro, detrás de un enrejado de madera como en la mayor parte de las iglesias centroamericanas. En el centro de México, la posición común en la pila de bautismo es en una habitación construida exprofeso, a la que se llega desde el sotocoro, el cual sirve, a la vez, de vestíbulo del templo y del bautisterio. De cualquier manera, arquitectónicamente cumple, precisamente, con la función de vestibular interiormente el edificio, puesto que no existe en esta iglesia cancel detrás de la puerta de entrada y contener en su área la pila de bautismo.
La nave del templo es rectangular, con ventanas a gran altura que presentan el abocinamiento de arcos sucesivos, según la costumbre chiapaneca desde el siglo XVI. Su techumbre es de madera cubierta con teja.
El presbiterio, más estrecho que la nave, da lugar a un amplio arco triunfal que se adorna con pequeños nichos cuya sección semicircular compartimenta el espacio entre ambas partes del edificio. El altar, colocado a mayor altura tiene por respaldo un retablo de pintura en cuyo centro se sitúa la escultura de San Juan Bautista.
Se trata de un edificio que, arquitectónicamente, no presenta grandes particularidades. Sin embargo, lo que es realmente notable, es la vida que le dan los chamulas, como lo cuidan, lo adornan y lo respetan, como efectúan las ceremonias desde los simples rezos individuales a los grupos familiares donde los niños juegan en torno del padre y de la madre y se les suben encima y se bajan de ellos, mientras estos permanecen sentados o arrodillados, entonando sus oraciones en forma de cantos, con series de filas de velas encendidas puestas sobre el piso, y con otros objetos y artefactos que utilizan para dichos fines.
Otras veces son grupos de hombres o de mujeres, ataviados con sus vestimentas blancas, negras o de colores de gran intensidad, los que forman una fila o un grupo de orantes, con sus banderas de telas estampadas y atributos de representación comunitaria como son los bastones de mando o de simples guardianes del orden. Aquí también le venden al visitante algún tejido típico, una camisa o un chamarro, y, en algunas festividades, hasta aguardiente.
Las imágenes de los santos se colocan en hileras, sobre pedestales comunes, a los costados de la nave. Cada santo está cubierto por amplios mantos de telas estampadas que dejan la cabeza de la imagen fuera sobresaliendo por arriba, y pueden llevar un espejo en su frente. También hay un grupo de santos viejos, alineados a una de las paredes del templo, a los que no se les rinde culto, no se les quema copal, no se les prende candela, nada se sabe de ellos porque nadie los conoce.
Es habitual escuchar la música de arpas y guitarras chamulas dentro del templo ya sea en las ceremonias o cuando los músicos se acercan a su patrón San Miguel; todo ello, a veces, en medio de gran algarabía y del entrar y salir de grupos de personas. Las cruces, las inevitables cruces, enormes y pequeñas juegan su papel entre algún árbol de pino, entre el incienso y las sartas de frutas, las guirnaldas coloreadas y el humo y las luces de sin número de velas que tienen ennegrecido el retablo y la techumbre del edificio y que llenan el interior de un espacio que por su colorido y densidad, tanto para la vista como para el sentido del olfato y para el oído, es totalmente diferente del espacio exterior. Aquí si hay una creación arquitectónica de primera importancia, el espacio expresivo estético del interior del edificio, lo que hacen tanto las formas construidas como los objetos simbólicos y ornamentales que los complementan y el uso diario que se les da.
Es una particularidad de esta iglesia que muy pocos edificios conservan, este encuentro con tradiciones ancestrales y el sentido mágico que poseen, que resulta deslumbrante para quienes sólo estamos acostumbrados a las ciudades modernas.
5.-DESCRIPCION DE LAS OBRAS DE ARTE
Son varias las obras de arte que contiene el interior del templo de San Juan Chamula, la más destacada es el retablo principal que ocupa, como es costumbre, el muro testero del presbiterio. Otra pieza singular es la pila bautismal, situada al lado derecho de la entrada, elevada del piso del templo, con sus barandales que convierten el bautisterio en un recinto cerrado o abierto, a voluntad; el valor de este lugar es arquitectónico y ceremonial, no es una obra de arte si atendemos a los valores convencionales.
La situación de los santos es propia de algunos templos de Chiapas no se usa en otros lugares geográficos, por ello también sorprenden al viajero. se ubican las imágenes en hileras, en alto, junto a las paredes; están cubiertas por amplias capas de telas estampadas de gran colorido, textiles modernos que imposibilitan ver las figuras, de las cuales solo sobresalen los rostros y las manos.
Según es frecuente en los poblados indígenas de Chiapas, las imágenes antiguas o modernas han sido repintadas con técnicas actuales. Hay aquí otra dificultad de valoración según los esquemas acostumbrados.
La circunstancia de que el pueblo chamula no permite tomar fotografías del interior del templo nos impide presentar alguna imagen, quien quiera conocerlo tendrá que ir al lugar. Aún así, existe alguna fotografía publicada, con seguridad tomada antes de la prohibición de sacar fotografías dentro de la iglesia.
6.-NOTAS BIBLIOGRAFICAS
(1) Artigas Hernández, Juan Benito, obra citada, pág 487
(2) Artigas Hernández, Juan Benito, obra citada, pág. 88-89
7.-BIBLIOGRAFIA
Artigas Hernández, Juan Benito San Cristóbal de Las Casas y sus alrededores, esbozo de su arquitectura en San Cristóbal de Las Casas y sus alrededores Patronato Fray Bartolomé de Las Casas. Secretaría de Educación y Cultura. Tuxtla Gutierrez, Chiapas, 1984.
Díaz del Castillo, Bernal Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España Colección Austral, Espasa-Calpe Argentina. Buenos Aires, México D.F., 1955.
López Mendez, Mariano; Pérez Pérez, Anselmo; De la Torre López, Juan; et al. El primer soldado llegó a Chamula, 1524 Secretaría de Educación y Cultura y Cultura de los Indios Mayas, A.C., Tuxtla Gutierrez, Chiapas, 1983.
Moscoso Pastrana, Prudencio Jacinto Pérez Pajarito, Ultimo líder Chamula Editorial del Gobierno del Estado de Chiapas. México, D.F., 1972.
Pozas Arciniega, Ricardo Chamula: Un pueblo indio en los Altos de Chiapas Instituto Nacional Indigenista. Editorial Libros de México, S.A. México, 1977.
Remesal, fray Antonio de Libro Primero. De la Historia de la Provincia de San Vicente de Chiapa y Guatemala, de la Orden de Nuestro Glorioso Padre Santo Domingo Impreso en la Tipografía Nacional. Guatemala, Centro-América. Guatemala, 1926.
Elaboró: Arq. José Benito Artigas
1984
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
San Juan Chamula