1.-ANTECEDENTES
Como muchos de los nombres de las poblaciones del Estado de Tlaxcala, Huamantla es una palabra compuesta, de origen náhuatl, derivada de cuahuitl, árbol maní; permanecer y el subfijo locativo tla, lo que significa, según el historiador Fernando Anaya, En el apiladero de madera. (1)
La población que existía en el lugar, a la llegada de los españoles, era de origen otomí y, seguramente el gran número de habitantes fue la causa de que se organizara en los primeros años de la conquista una ciudad con traza y características marcadas por los europeos, aun cuando la mayoría de los vecinos eran indígenas.
En 1528, un grupo de caciques del lugar, viajaron hasta España, venciendo todas las dificultades que en esa época implicaba un viaje de esa naturaleza, para presentarse ante Carlos V quién reinaba en ese momento, para solicitarle que por cédula real, permitiera el establecimiento de esta población, lo cual fue concedido hasta 1534, por lo que la ciudad cumple en 1984, cuatrocientos cincuenta años de fundada, siendo por lo tanto una de las más antiguas de Tlaxcala y de todo el país.
Por cierto que no todos los caciques que realizaron el largo tiempo regresaron, pues como se anota en los Lienzos de la fundación de la ciudad de San Luis Huamantla reproducidos en 1984 por el Instituto Tlaxcalteca de la Cultura, sólo volvieron algunos ya que otros fallecieron por diferentes causas en el trayecto.
La primera parroquia de Huamantla fue el templo de la Santa Cruz y, la segunda, la de San Luis Obispo, que se fundó en 1641 y la que ininterrumpidamente hasta este tiempo ha sido la sede del Párroco.
2.-EMPLAZAMIENTO
La Parroquia de San Luis Obispo se localiza en el centro de la población, en la calle Hidalgo Poniente, (que es la más importante) haciendo esquina con la plaza Juárez o jardín principal, que por cierto como es característico de la provincia mexicana, tiene su kiosco construído a principios de siglo y dos grandes y sencillas fuentes de la misma época.
El trazo de la ciudad de Huamantla se hizo con el criterio que imperaba en ese momento para los nuevos centros de población que se ubicaban en terreno sensiblemente plano, es decir, calles rectas en forma de retícula, teniendo al centro el gran espacio abierto en donde ahora se ubica el jardín y, frente al cual, se construyeron los edificios más importantes; el templo, el ayuntamiento y la colecturía, así como las casas de los personajes más importantes y de los comerciantes.
Cuando en el Siglo XVII se inició la construcción de la parroquia, seguramente se demolieron algunas casas para realizar el edificio en juicio, el que por cierto no cuenta con atrio, sino que se construyó iniciando su fachada principal en la banqueta, quizás para hacerlo destacas más, cosa que se logró, pues hasta la fecha sigue siendo volumétricamente el edificio más importante del centro.
Por lo que se refiere a las construcciones colindantes, éstas son de poca altura, predominando las de un solo nivel con uso principalmente habitacional y en menor grado comercial, sobre todo las que están por el lado del jardín. Debe notarse que la importancia visual de la parroquia se ve disminuída por la exuberante vegetación del jardín, desde algunos puntos de la plaza.
3.-HISTORIA
A partir de la fundación de la ciudad de Huamantla en 1534 se construyeron varias capillas, que fueron aumentando en número, conforme crecía la población habiendo llegado a cerca de veinte hasta 1540 el templo más importante, fué el de San Francisco, que se construyó en el centro de la población, y que fué el más grande e importante, hasta que se consideró que las ordenes mendicantes, de los Franciscanos, Dominicos y Agustinos debían de pasar a segunda importancia, dejando entonces la responsabilidad desde el punto de vista religiosa al Clero Secular.
En 1640 el Sr. Obispo Don Juan de Palafox y Mendoza secularizó los conventos, mandó levantar nuevos templos parroquiales e instituyó párrocos a los que se encargó la cura de almas de los naturales (2) es decir, que la parroquia de San Luis Obispo se inicia inmediatamente después, situación que se comprueba en un cuadro que aparece en la sacristia, y que describe con todo detalle la vida del templo desde 1641, hasta la fecha, proporcionando información sobre los párrocos (nombre y duración en el cargo), así como otros datos de interés (bautizos, defunciones etc.)
Por lo que se refiere a los autores del proyecto y la construcción, no se cuenta con información, pero por las características de la obra, se puede asegurar, que quien haya sido, tenía conocimientos y experiencia en este tipo de edificios, y aunque parezca arriesgado, podría pensarse, que en elgo influyó la cercana ciudad de Puebla, de donde precisamente había surgido la idea de las parroquias. Apoya esta idea, la solución de las fachadas y el hecho de que el órgano y algunos cuadros también se trajeron de dicha ciudad.
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
Exteriormente, el conjunto arquitectónico es de una gran riqueza volumétrica, que es consecuencia de los diversos espacios interiores que conforme el edificio, siendo el resultado, altos muros, cúpulas y fachadas de rico tratamiento, desprendiéndose de ello, que para la realización de la obra, se destinaron los mejores materiales y esfuerzos de la población.
Como fué común en aquella época, todas las grandes obras duraban mucho tiempo en terminarse, de tal manera, que se tienen en este caso diversos criterios formales en las diferentes partes del edificio así como en su mobiliario y objetos complementarios.
En las dos fachadas, principal y lateral, se aprecia un mismo criterio aunque por supuesto son diferentes, en la primera, a base de tres cuerpos, elaborados todos en piedra, de canto rodado traída de la sierra de la Malinche; en el primer cuerpo se ubica la gran puerta de acceso que remata en la parte superior en un arco de medio punto, observándose a ambos lados de ésta, dos nichos en los que se encuentran dos esculturas de Tecalli verdoso-amarillento, que se destacan en el oscuro color de la piedra.
El segundo cuerpo de la fachada, de menor altura que el primero, se separa de éste por medio de una cornisa, y casi sobre ésta; en cada una de las tres entrecalles, otros tres nichos también con sus respectivas esculturas de tecalli. Siendo el del centro más grande que los laterales y que enmarca a una virgen que como las otras figuras presenta un desgaste que en algunos puntos ha borrado los rasgos. La presencia de esculturas del material descrito resulta sobresaliente, tanto así, que el famoso historiador Francisco de la Maza, realizó algunos estudios sobre el uso de este delicado y fino material, en relieves y esculturas usados en la arquitectura virreinal mexicana. (3)
En el tercer cuerpo de la fachada, que es el más alto, se ubica la ventana del coro, que coincide con el eje de la puerta, ésta es circular y aunque pequeña da la impresión de ser mayor por el derrame que tiene hacia afuera. Al lado izquierdo de la fachada se levanta la torre campanario, con sus dos cuerpos, que tienen en sus cuatro lados pequeños vanos con cerramiento de arcos de medio punto y en las esquinas sus respectivas pilastras en que se apoyan interiormente las vigas de donde cuelgan las campanas.
A la derecha de la fachada, sobresale un pequeño muro con un hueco llamado espadaña, que probablemente se construyó antes de la torre, para colocar en él provisionamente la campana, quedando después sin uso o para la matraca que se usa en semana santa.
La fachada lateral es más sencilla que la principal, aquí la puerta de acceso, que también es de medio punto, sobre ella hay un nicho con su correspondiente escultura de tecalli. Frente a esta puerta existe un pequeño espacio en el que participa de manera importante el volumen del nuevo baustisterio, que al parecer se construyó a fines del siglo pasado o principios de éste.
La planta de la nave es de cruz latina, al entrar a ella lo primero que se aprecia es en la parte alta, el coro, que es soportado por un arco rebajado y una bóveda de arista. La cubierta está realizada con bóvedas de crucero (pechinas) en cada una de las cuales se tiene a uno de los cuatro evangelistas.
En una placa de mármol que se encuentra a un lado de la entrada y fachada el 5 de agosto de 1950, se menciona que el párroco D. José María Téllez fué el promotor de la decoración del templo, que es a base relieves de yeso, que se colocaron profusamente en pilastras, arcos y en todos lados donde los maestros ejecutores (José, Mariano y Luis Lira) lo consideraron conveniente. Esto se sabe, porque en la parte posterior del órgano que está en el coro, ellos también dejaron una inscripción, aunque no tan elegante como la antes mencionada.
Todo el piso de la nave, es de duela de madera de pino, a base de cuadros en forma de ajedrez, la que después de muchos años ha llegado a tener una textura, en que los nudos de la madera resaltan por su mayor dureza. Esto es importante porque muchos templos tenían este material y en la actualidad, pocos son los ejemplos en que el pavimento original existe. En el presbiterio que está tres escalones más arriba, el piso original se sustituyó recientemente por mosaico. Al lado derecho del presbiterio se encuentra la sacristía, en la que se localizan como en las demás áreas de la Parroquia algunos muebles de valor artístico que se describen más adelante.
Casi al centro de la nave del lado izquierdo se encuentra el acceso al Sagrario que también es de cruz latina, con cúpula en el crucero, la que vista desde el exterior es muy bella, sobre todo por los enmarcamientos de los lucarnos (tragaluz) y la decoración de la linternilla, que es a base de argamasa (cal y arena) con gran riqueza de textura y relieves. Esta decoración por cierto fue muy característica en el siglo XVIII en la región de Puebla y Tlaxcala. El Ciprés de esta capilla, que es del siglo pasado (neogótico), perteneció originalmente al templo de la Caridad que, sin justificación se demolió hace algunos años para construír en su lugar un nuevo templo.
En el brazo derecho del crucero se encuentra otra capilla dedicada a Santa Teresita del Niño Jesús, decorada en el siglo pasado en estilo neoclásico, con un retablo no muy valioso pero bien integrado con su envolvente. La bóveda, que se encuentra al centro de la capilla, es de plato (rebajado).
En el brazo izquierdo, se encuentra un pequeño local que en un tiempo fue el baustisterio, pero que dejó de funcionar, cuando se construyó el que se localiza a la entrada del templo, ahora este lugar está sin uso y sirve para pasar a un patio y a la casa de los padres vicarios, que es de construcción reciente.
En el atrio lateral, se encuentra la entrada a la casa cural, que no tiene mayor importancia ya que es una casa adquirida posteriormente para tal fin.
Por lo anotado anteriormente, puede considerarse que la Parroquia de San Luis Obispo de Tolosa es uno de los monumentos arquitectónicos más valiosos de la Ciudad de Huamantla.
Al lado izquierdo, frente al anterior, se encuentra otro magnífico retablo de dos cuerpos, dedicado a Cristo, también es muy antiguo (S. XVII o principios del XVIII) y de muy buena calidad, es de apreciar con detalle las columnas cariátides (con cabeza humana).
El retablo principal mas que describirlo debe verse, gozarse, es sin duda alguna de primera importancia y, por supuesto, el mejor entre todos los que existen en la población, está dedicado a San Luis Obispo cuya escultura se encuentra al centro, la que según tradición popular fue traída de Guatemala Arriba del Santo Patrono, está otra escultura de San Miguel y, coronando todo el conjunto, la Santísima Trinidad, con la paloma blanca del espíritu santo, rematando todo el conjunto. Por sus características formales, se ubica como construído en la segunda mitad del Siglo XVIII, que es cuando llega a su apogeo el barroco churrigueresco al que corresponde este ej emplo.
5.-OBRAS DE ARTE
La parroquia es muy rica en obras de arte de diversa índole, retablos, muebles, pinturas de caballete y el órgano son entre otros, el patrimonio el templo.
En el coro se puede ver el órgano, que es sin duda una de las obras más importantes del templo, en un documento que se encontró dentro del mueble, está la inscripción José, Joaquín y Santa Ana, sean con esta obra José Rodríguez Maestro de la Catedral (de Puebla) año 1766. Es decir, se fabricó al final de la etapa barroca. La pieza fue restaurada en 1983 por Susan Tehershall, colaborando con ella Ignacio Zapata, Alejandro Torres y Salvador Escamilla; así después de largo tiempo de silencio, el bello instrumento volvió a estremecer con sus voces a los Huamantlecos, el viernes 2 de marzo de 1984.
En el muro izquierdo que está a la entrada del templo se tiene un cuadro de grandes dimensiones, con el tema de las ánimas del purgatorio, de autor anónimo, que contiene en el lado inferior izquierdo la siguiente inscripción El 24 de mayo de 1890 años se acabó este altar siendo Mayordomo de la Cofradía de las Benditas Animas Don Rafael Fernández de Lara.
En los muros laterales de la nave se encuentran dos extraordinarios retablos barrocos, probablemente del Siglo XVII; el de la derecha es de tres cuerpos con veinticuatro pequeños cuadros al óleo, de muy buena calidad y entre los que se pueden ver a los doce apóstoles, a San José, la Virgen y San Antonio entre otros. Todo el retablo es de madera con oro de hoja. Hace pocos años, se puso aquí este retablo, ya que se encontraba en otra parte de la nave, pero existe la duda de donde estuvo originalmente (en el crucero, armonisado con el retablo principal, o en otro templo).
El púlpito que se encontraba en este lugar (que debió haber sido de muy buena factura) se sustituyó para colocar el mencionado retablo.
6.-BIBLIOGRAFIA Y NOTAS
1. Anaya Monroy, Fernando. La toponimia Indigena en la historia y la cultura de Tlaxcala. UNAM. México 1965.
Pág. 51.
2. Chauvet, Fray Fidel de Jesús. Los franciscanos en México. Provincia del Santo evangelio de México 1981.
Pág. 143.
3. Maza, Francisco de la. La Mitología Clásica en el Arte Colonial de México XXIV. UNAM. Estudios y fuentes del Arte en México 1968.
Nava, Luis. Historia de Huamantla, Editorial Progreso S.A. Tlaxcala 1974.
ELABORO: ARQ. JAVIER VILLALOBOS
FECHA: 1986.
