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Nombre del Inmueble
San Simón y San Judas
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000494
Estado, Municipio, Localidad
Tlaxcala > Calpulalpan > Heroica Ciudad de Calpulalpan (290060001)
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000494
Contenidos
1.-ANTECEDENTES
Cuando llegaron a la capital de la Nueva España en 1524, los primeros misioneros franciscanos, se organizaron y distribuyeron en las ciudades de los señoríos de Tenochtitlan, Tetzcoco, Tlaxcallan y Huexotzingo, que por ser las más importantes, constituían puntos estratégicos para poder controlar más poblaciones. De esta manera quedaron formadas las cuatro poivincias, donde los frailes iniciaron el proceso de evangelización de los índigenas. (1)
Calpulalpan, cuyo nombre deriva del náhuatl y que significa En los barrios (2), quedaba adscrito para este momento a la jurisdicción de Tetzcoco, que extendía sus fronteras más allá de sus límites actuales. (3)
Es importante señalar que al principio Calpulalpan sólo gozaba de una importancia relativa y será únicamente a partir del auge comercial que se lleva a cabo entre la ciudad de México y Veracruz, que empieza a destacarse debido a su ubicación geográfica, ya que por tal lugar cruzaba el llamado camino real que comunicaba a los sitios antes mencionados.
Lo anterior queda más fundamentado cuando el historiador George Kubler menciona: A lo largo de las carreteras de la Nueva España, se construían posadas para los viajeros europeos y criollos ...Posadas de este tipo aparecieron hacia 1529 en Tetzcoco, Calpulalpan y otros pueblos. (4)
Tomando en cuenta lo anteriormente expresado, queda claro por que en su primera etapa de catequización, el sitio en cuestión contaba únicamente con la atención esporádica de los religiosos franciscanos que se alojaban en la pequeña capilla de visita que para entonces debió existir y en donde realizaban sus labores de adoctrinamiento; para lograrlo se valieron de intérpretes o se auxiliaron con varios métodos mímicos y gráficos, ya que fueron pocos los misioneros que aprendieron el idioma náhuatl.
Con el desarrollo del comercio la población no sólo adquirió un estatus económico mayor, sino también vió cómo se incrementaba su número de habitantes, por lo que se hizo necesaria una atención religiosa permanente, construyéndose el inmueble que nos ocupa a fines del siglo XVI.
2.-EMPLAZAMIENTO
Saliendo de Texcoco por la carretera federal que va rumbo a Veracruz y aproximadamente a 36 Kms. de la misma, se encuentra la población de Calpulalpan.
Penetrando por la vía que conduce al centro del poblado se llega al convento de San Simón y San Judas, perteneciente a la orden franciscana y actualmente parroquia del lugar. Su espacio se halla delimitado por cuatro calles a saber: al norte, con Guillermo Prieto, al sur, con Galeana; al oriente, con 5 de Mayo; y al poniente con Cristobal Colón.
Debido a las transformaciones que ha sufrido el espacio original, los accesos se encuentran orientados al norte y al sur y son laterales; el principal y más importante que debería estar al poniente (de acuerdo al desarrollo conventual franciscano del siglo XVI) no se encuentra, debido quizás a una mutilación del atrio, el que aparentemente debió de haber sido más grande. Las entradas están constituídas por arcos simples de medio punto.
Por la calle de Guillermo Prieto se accede por medio de siete escalones de piedra de forma semicircular; la que corresponde a la de Galeana, se encuentra a nivel de calle y causa la sensación de que el atrio fuera continuación de la misma.
El convento y templo están orientados de poniente a oriente y su atrio se delimita al exterior por muros que miran hacia las calles de Cristobal Colón, Guillermo Prieto y Galeana; el interior del mismo se encuentra actualmente seccionado por elementos fabricados a base de malla. Visto de frente, el inmueble presenta varias puertas, las que de izquierda a derecha corresponden a la Capilla de la Purísima Concepción, Capilla del Tercer Orden y acceso al templo. Junto a éste, se puede observar la arquería de la capilla abierta a la que se adosa un cuarto de forma rectangular que corresponde a la notaría y que es de reciente factura. En el interior de él, se guardan las actas de bautismo y su acceso es a través de una puerta que mira al norte y que es perpendicular a la fachada principal de la iglesia. En la parte central del atrio que está seccionado, aparece solitaria una Detrás de ella se observan restos de canchas de balón- cesto, las que afortunadamente ya no cumplen para los propósitos de tal juego, que indudablemente ocasionaba deterioros al inmueble.
3.-HISTORIA
El convento, cuya construcción pertenece al final del siglo XVI es mencionado por vez primera en la Relación de la visita que hizo en la Provincia del Santo Evangelio el Padre Francisco Alonso Ponce el año de 1585 y que a la letra dice así:... El convento no estaba acabado ni tenia iglesia sino de prestado, el claustro bajo estaba hecho, con un cuarto alto y parte de otro en que moran los religiosos, que de ordinario son dos: La vocación es de San Simón y San Judas. (5)
Es con estos datos que se puede fundamentar la poca importancia que tuvo Calpulalpan durante el siglo XVI para la orden franciscana, dado que ni siquiera tenían iglesia, aunque también puede ser válida otra hipótesis, la de que al ser trasladados una gran cantidad de indígenas de la zona para que sirvieran como fuerza de trabajo en la construcción del templo franciscano de Texcoco, Calpulalpan pasó a segundo término. A su vez, no hay que olvidar las enfermedades traídas por los españoles que diezmaron la población indígena.
No obstante lo anterior, los vecinos de la población van a costear la obra del templo, mismo que empieza a construírse en el año de 1597, para concluír los trabajos el año de 1608, misma fecha que aparece en la parte baja de la ventana del coro y que corresponde al segundo cuerpo de la fachada principal.
A raíz de las secularizaciones que se llevan a efecto en los años de 1640 y 1770 respectivamente (6), el inmueble deja de pertenecer a los franciscanos, para pasar a formar parte de los bienes del clero secular. Sin embargo el conjunto conventual no siguió siendo ocupado pues fué sustituido en sus funciones litúrgicas por la parroquia que se construyó posteriormente. De aqui en adelante se le dieron otros usos, como se verá más adelante.
Calpulalpan para este momento todavia pertenecía al Estado de México y pasó a formar parte de Tlaxcala hasta el año de 1863. (7)
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
El conjunto está formado por el edificio conventual. El templo, tres capillas y un atrio. La nave principal está orientada de poniente a oriente y su portada consta de tres cuerpos. El primero se forma por medio de un arco de medio punto, realizado en cantera labrada; en su interior, aparecen relieves con motivos florales y como apoyos, existen columnas pareadas adosadas a la pared. Enmarcando los anteriores elementos aparecen motivos vegetales realizados en argamasa. Separado por medio de una cornisa se destaca el segundo cuerpo, el cual posee al centro la ventana del coro cuyo desarrollo es de forma rectangular con jambas y dintel fabricadas en piedra. En su parte inferior que a su vez es de mayor anchura, aparece la fecha de 1608. A los costados de la misma se hallan sendas columnas coronadas con capiteles de tipo corintio que se desplantan de una amplia base y rematan con elementos de tipo piramidal. Posee al igual que el anterior cuerpo, motivos florales ejecutados a base de argamasa. El tercer cuerpo se separa también del segundo por medio de una cornisa y está formada por tres nichos que ocupan el espacio central y que se rematan por discretos frontones de argamasa. En el interior de los nichos aparecen figuras de piedra, siendo la central un San Antonio de Padua, flanqueado por Santo Domingo de Guzmán y San Francisco de Asís. Otro aspecto que llama la atención, es la figura de un niño ejecutado en argamasa que se localiza abajo del nicho central y que parece estar cargando o sosteniendo la cornisa de los tres nichos.
A los lados del cuerpo central se desplantan las torres que constan cada una de cuatro cuerpos. El primero corresponde a los cubos de las escaleras, los cuales se iluminan por discretos rosetones. El segundo cuerpo pose arcos de medio punto en las partes centrales y que miran hacia los cuatro puntos cardinales; en sus esquinas destacan columnas salomónics helicoidales fabricadas en argamasa que se apoyan en bases decoradas con flores, mismas que aparentemente sostienen un niño por la parte inferior. Los dos siguientes cuerpos son iguales al anterior a excepción de que el tercero no posee niños en las esquinas y el cuarto es más bajo que los anteriores, rematado a su vez por una cruz metálica. Aunque ambas torres son semejantes, la que se encuentra al lado derecho es de reciente construcción. Se inició en el año de 1940, terminándose dos años después.
Otro dato que puede servir de referencia, es el de que la torre original posee arcos de medio punto en sus tres últimos cuerpos y la nueva tiene en el tercer cuerpo un reloj.
Penetrando al templo podemos observar la nave cuya planta es de tipo rectangular cubierto con viguería y presbiterio poligonal. El espacio interior está seccionado por medio de cinco arcos fajones que sirven de apoyo a las vigas que corren en sentido longitudinal. En el presbiterio, es posible observar un retablo de madera de hechura reciente. Posee cuatro nichos ocupados por santos que se encuentran en la parte media de las entrecalles que forman pilastras de fuste estriado y capitel jónico (uno de los ordenes clásicos griegos). En la parte superior, se encuentra la imagen de la virgen de Guadalupe enmarcada por cuatro columnas (dos por lado). En los muros laterales, existen dos grandes lienzos que representan escenas de la pasión de Cristo. Todo este espacio queda cubierto por una bóveda de arista que se forma por la intersección de dos bóvedas de cañón de igual medida y a la misma altura. Es iluminada por ventanas que miran al norte, sur y poniente.
Al lado izquierdo de la nave y paralela a la misma, se hallan dos capillas, la primera corresponde al Tercer Orden y su acceso por el atrio, es a través de una puerta con marco poligonal que está sostenido por pilastras de cantera y columnas con capitel corintio que representa una cesta de ofrendas, rodeada de hoja de acanto. Se divide del segundo cuerpo por medio de una cornisa de piedra, arriba de la cual, aparece la ventana del coro de forma rectangular con pilastras y remata con adornos de tipo cónico, llamados pináculos. Se encuadra con un marco de sillarejos y una cruz al centro como adorno final.
Contiguo a la anterior y al lado izquierdo, existe otra capilla dedicada a la Virgen María. Su acceso desde el atrio está formado por un arco de medio punto que tiene por jambas, pilastras de base alta; en seguida, una cornisa y un medio círculo que ostenta el escudo de María. Le rodean motivos vegetales realizados en argamasa y una cornisa de remate con el mismo tipo de motivos. El conjunto está coronado por un muro calado donde van las campanas, (espadaña), a cuyos lados aparecen columnas salomónicas decoradas y en medio sobre la parte superior se halla una cruz apoyada sobre un elemento esférico. Su interior es de planta rectangular con una bóveda que para su iluminación presenta a los lados vanos cilíndricos (lunetos). La cúpula es de media naranja con linternilla y cupulíhn, que se decora al interior a base de motivos florales y querubines.
Al lado derecho de la nave principal y perpendicular a ella, se localiza la capilla de San Antonio que es de planta rectangular y bóveda de lunetos; la cúpula es gallonada (se ven sus nervaduras), tiene linternillas y cupulín. Aunque su interior es el mejor conservado, carece de interés; dado que los elementos decorativos que adornan su techo son de reciente factura, al igual que el retablo principal que es de pretenciones neoclásicas. Por esta capilla y casi en el acceso se encuentra el paso que lleva al claustro el cual consta de dos pisos y techo de viguería. Este es quizás la parte más interesante del convento, el cual se constituye por un espacio cuadrado con un patio ejecutado a base de ladrillo y piedra, teniendo desniveles que corren al centro para recoger en el aljive el agua de lluvia. Los corredores del claustro alto y bajo poseen columnas de madera de una sola pieza en cuya parte superior tienen unos maderos cortos del mismo material (zapatas), que sirven para sostener la arquitrabe. El total de columnas por claustro es de doce, lo que hace un total de 24, considerando la parte baja y la alta.
El claustro bajo tiene pretiles fabricados a base de mamposteria con aplanado. Los del claustro alto están realizados a base de ladrillo, colocados en forma inclinada, lo cual genera una especie de celosía. Su fabricación es de fecha reciente. Otro aspecto importante del claustro bajo, lo constituyen las pinturas que aparecen en sus muros y que muestran motivos vegetales que se mezclan con aves, querubines y ángeles; como elemento límite, aparece un cordón franciscano que en ocasiones se enreda. Todas estas pinturas se encuentran restauradas aunque aparentemente el ejecutor no se contentó exclusivamente con ésto, dado que, de manera arbitraria; una serie de columnas cuyo fuste se decora con elementos diagonales que corren de un lado a otro formando una especie de cesta con tímidas perlas gótico isabelinas que aparecen por doquier; co mo remate triunfal, capitales corintios. Por otro lado, en las esquinas del mismo claustro bajo aparecen nichos con pinturas recientes (dos por esquina) aunque es posible suponer que en su origen, guardaron distintos elementos.
Por las modificaciones que ha sufrido el convento, es difícil aseverar el tipo de funciones que cumplía cada espacio. Sin embargo, es posible suponer que el área que actualmente se emplea como sacristía, pudo haber sido el refectorio o comedor. La sala de capítulo que se encuentra en el claustro alto sirve en la actualidad como biblioteca. Por último cabe mencionar que la parte que correspondía a los anexos - debido a la ocupación de diversos organismos oficiales - al paso del tiempo ha sido modificado en exceso, razón por lo cual es muy difícil determinar como fué originalmente.
5.-OBRAS DE ARTE
En este aspecto, se puede decir que el inmueble posee obras de arte significativas aunque buena parte de ellas están aisladas.
Como primera obra notable podemos mencionar la cruz atrial, tallada en cantera, con fuerte sabor indígena, y que como todas las cruces del siglo XVI que se encontraban en los atrios, posee elementos que simbolizan la pasión de Cristo (corona de espinas, clavos, martillo, etc.)
Otra pieza importante, digna de ser mencionada es una pila bautismal que se encuentra casi en el acceso del templo al lado derecho. Está trabajada en piedra y es de una sola pieza, tiene 45 centímetros de díametro, y a su alrededor se ve labrado el cordón franciscano, teniendo como apoyo un pedestal de proporciones adecuadas.
En materia pictórica, es posible observar en los muros laterales del presbiterio, dos lienzos que corresponden a la etapa del barroco. El que está colocado en el muro que mira hacia el norte, representa a Cristo en el momento de la flagelación. Su valor estriba en el hecho de que a pesar de los años aún conserva en su parte inferior derecha la firma del autor y que a la letra dice: Francisco Antonio Vallejo, pintor mexicano, 1778. El del muro que ve al sur, por su factura y temática aparente, corresponde al mismo autor, aunque en este caso, desafortunadamente no existen datos ni firma que pueda coroborar tal hipótesis. La escena que representa corresponde al momento en que le es colocada la corona de espinas a Cristo.
El claustro bajo posee en sus muros una rica gama de decorados que pueden subdividirse en dos aspectos. El primero de ellos consiste en la decoración, que a base de frescos ejecutados en blanco y negro, muestra motivos vegetales y animales en miniatura que se conjugan con ángeles y querubines limitados por un cordón franciscano que en algunas partes se muestra enlazado. Cabe aclarar que en este caso, es posible apreciar todo un proceso de restauración, no mal ejecutado a excepción de unas columnas cuyo fuste está cruzado por elementos diagonales que corren de uno a otro lado, así como otros que pretenden dar idea de perlas góticas isabelinas. El segundo aspecto los constituyen ocho pinturas contemporáneas, que se encuentran ocupando el espacio que forman los nichos qu se hallan en las esquinas del claustro (dos por cada esquina).
Cosa distinta ocurre en la antesacristía y sacristía. En ellas se aprecian también partes de una cenefa con el mismo tipo de motivos que los del claustro, aunque afortunadamente no han sio restauradas, por lo cual muestran su originalidad, no obstante el deterioro que han sufrido.
El claustro alto posee obras aisladas de pinturas, entre las que destacan un San Francisco, la Virgen de Guadalupe, San Luis Obispo, San Buenaventura, San Diego y San Iván Capistrano.
En uno de los muros de la sala de capítulo, que hoy se utiliza como biblioteca, existe una pintura de columnas y arcos de medio punto que ha sido picada para re-enyesar. Otras pinturas que se encuentran en la misma sala, son una de la aparición de la Virgen de Guadalupe y otra de San Francisco.
Debido a las modificaciones que ha sufrido el convento en lo referente a sus espacios, sólo nos resta mencionar un fresco que se halla en el muro que divide la parte que es empleada como estacionamiento y cuyo acceso se localiza por la calle Cinco de Mayo y que muestra un plano en donde aparece parte de la iglesia de Calpulalpan y de los conventos que dependían de ella. Desafortunadamente la mayor parte de este fresco se ha perdido lo que es doloroso ya que podría haber aportado valiosa información.
6.-BIBLIOGRAFIA
1. Chauvet, Fray Fidel de Jesús. Los franciscanos en México Provincia del Santo Evangelio de México, 1981. Pág. 26.
2. Anaya Monroy, Fernando. La Toponímia Indígena en la Historia y la Cultura de Tlaxcala UNAM. México 1965, Pág. 49.
3. Davies, Claude. Los Señorios Independientes del Imperio Azteca. INAH. México, 1968. Mapa No. 3, Pág. 153.
4. Kubler, George. Arquitectura Mexicana del siglo XVI, Fondo de Cultura Económica. México, 1983.
5. Ciudad Real, Antonio de. Tratado curioso de documentos de las grandezas de la Nueva España. Relación breve y verdadera de algunas cosas de las muchas que sucediron al padre Fray Alonso Ponce en las provincias de la Nueva España siendo coisario General de aquellas partes. UNAM. Instituto de Investigaciones Históricas. México, 1976.
6. Nava Luis. Historia de Tlaxcala. Tlaxcala, 1983. Págs. 57 - 58.
7. García Cubas, Antonio. Diccionario Geográfico, Histórico y Biográfico. México, 1899, Cuatro Vol.
8. García Cubas, Antonio. Op. Cit.
ELABORO: ARQ. JAVIER VILLALOBOS
FECHA: 1985.
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
San Simón y San Judas