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Nombre del Inmueble
Santa Bárbara
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000434
Estado, Municipio, Localidad
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000434
Contenidos
1.-ANTECEDENTES
Cabe a Santa Bárbara el honor de ser el primer centro urbano fundado en el estado de Chihuahua ya que los asentamientos prehispánicos de Paquimé (Casas Grandes), que dejaron notables ruinas, habían sido abandonados mucho antes. Fundación llevada a cabo por Don Rodrigo del Río en 1564, apenas a escasos cuarenta y tres años de consumada la conquista de la Gran Tenochtitlán, pero a más de mil kilómetros de distancia.
La colonización de la Nueva España fué en verdad, relampagueante. Los primeros grandes avances hacia el norte los realizaron las famosas expediciones de Fray Marcos de Niza, Vázquez de Coronado y Vázquez del Mercado, con objetivos mínimos y poco resultado práctico pero abriendo el camino del norte a un tipo de exploración más efectivo.
El avance español hacia el norte que resultó base firme de una colonización efectiva se realizó poco después de 1660 partiendo de Zacatecas. Don Francisco de Ibarra, autorizado por el virrey, descubrió minas en Nombre de Dios y Tapia, fundó Durango indirectamente por medio de su teniente Alonso Pacheco, y se convirtió en el primer gobernador de la Nueva Vizcaya, a la que él mismo había dado nombre.
El segundo gran explorador y colonizador, también fué el segundo gobernador. Pero su fama se fincó más que nada en el descubrimiento de las mismas de Santa Bárbara y la fundación de esta población, tal fué Don Rodrigo del Río.
Los franciscanos siempre marchando con las avanzadas de la colonización española y es de suponerse que acompañaron a Don Rodrigo del Río, o por lo menos lo siguieron muy de cerca, ya que un año después, en 1665, estaban establecidos en San Bartolomé, (hoy Valle de Allende). Santa Bárbara debió quedar desde un principio en manos del clero diocesano para la tención religiosa de la población española y mestiza.
2.-EMPLAZAMIENTO
El templo de Santa Bárbara se ha visto avasallado por el crecimiento de la población y actualmente su situación de preminencia depende únicamente de u ubicación central.
La población a la que dió nombre es actualmente un centro minero en plena producción con una actividad notable. Dentro de la traza típica de un pueblo minero, enclavado entre montañas, su crecimiento se ha visto forzado a seguir la topografía del terreno manteniendo así su carácter primitivo ya que ni aún las comunicaciones viales indispensables en todo centro urbano actual han encontrado acomodo adecuado.
Esta situación del entorno natural sin duda obligó a los fundadores del templo a cambiar el sistema usual en aquel tiempo referente a la orientación que en este caso es con frente al poniente en vez del oriente. Porque toda la población se extiende a lo largo de una cañada que se estrecha en algunos lugares, en sus puntos más amplios no tiene más de un centenar de metros de terreno plano y los cerros que la rodean, limitan la zona urbana tanto por lo escarpado de sus pendientes como por su regular elevación que no permite una extensión del poblado más allá de sus cimas.
En una de aquellas pequeñas zonas planas, casi en el fondo de la cañada tuvo principio la población y se encuentra situado el templo. Una pequeña plaza se extiende a su frente, calle de por medio y otra igualmente pequeña se abre hacia el sur, espacios que en algún tiempo formaron parte del conjunto de la iglesia y que actualmente están bordeados por algunos edificios públicos, de uno y dos niveles, de forma que no puede considerarse un centro cívico propiamente dicho. Hacia el oriente el terreno presenta una pronunciada pendiente inmediatamente a espaldas del templo.
3.-ASPECTO HISTORICO
Al consolidarse el primer asentamiento español en el territorio del actual estado de Chihuahua propiciado por el descubrimiento del rico mineral de Santa Bárbara, la población de mineros establecida junto a sus lugares de trabajo creció de inmediato.
Las instituciones indispensables para el funcionamiento normal de la nueva población se fueron creando con la misma celeridad. A los pocos años se le concedió el grado de Alcaldía Mayor y para 1645 era considerada como villa por las autoridades virreinales.
En aquella sociedad cuya vida estaba tan íntimamente ligada en todas las ordenes con la actividad religiosa, la atención espiritual de los pobladores cobraba una importancia igual a la de las actividades administrativas, comerciales o militares. Por tanto su organización era tanto o más compleja que la de aquellas otras.
Las autoridades eclesiásticas cuidaban de mantener ciertas reglamentaciones para el establecimiento de los templos y su posterior servicio. Estas circunstancias determinaron la construcción del primer templo de Santa Bárbara.
Su edificación corrió a cargo de los personajes principales del lugar y el pueblo en general ayudada y reglamentada por el obispado con cabecera en Guadalajara y a partir de 1621 en Durango.
Las jurisdicciones para el ejercicio de la labor apostólica de los sacerdotes pertenecientes al clero secular y a las ordenes religiosas estaban claramente determinadas por las autoridades eclesiásticas. Mientras los religiosos poseían más personal y mejor organización, los seglares, menos numerosos y preparados, dependián directamente del obispo y eran protegidos por éste asignándoles la exclusividad del trabajo en los centros urbanos.
De esta forma, mientras los franciscanos tuvieron que pasar de largo y establecerse en el Valle de San Bartolóme, el clero secular se encargó de la construcción de templo de Santa Bárbara y la atención de la parroquia desde su fundación hasta nuestros días.
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
Tras una reja metálica de reciente factura, un pequeño atrio separa de la calle a los diferentes elementos que forman, de manera poco integrada, la fachada del antiguo templo de Santa Bárbara. En un mismo paño se pueden distinguir, en principio, dos partes de esta fachada; una de mayores proporciones que contiene la portada y al norte, la torre acusada hasta su desplante por lineas y cambios de color.
Esta portada constituye el punto más interesante del templo desde el punto de vista de sus raíces en la segunda mitad del siglo XVI y su desarrollo en las épocas de auge de la minería virreinal. Conserva, en un conjunto de composición más reciente, algunos elementos de sus primeros y más brillantes años. Consta de dos cuerpos superpuestos enmarcados en toda la altura por una moldura trabajada en estuco y formada por dos pilastras con basa y capitel que reciben un gran arco de medio punto. Dentro de la superficie que enmarca, el primer cuerpo contiene la puerta de entrada cerrada con arco de medio punto incompleto en sus extremos, ya que su intradós tiene su linea de arranque en el paño lateral de dos pilastras que sobrepasan en altura a tod el arco, dejando al extradós incompleto. Las pilastras laterales sostienen el segundo cuerpo tratado similarmente al primero pero en menores dimensiones y con el paño central en forma de nicho que contiene el relieve completo en cantera de la figura de la santa patrona. Es esta una figura de indudable antigüedad, bastante deteriorada y que la tradición oral ubica en los primros años de vida del templo. La mayoría de las piezas de cantera de estos dos cuerpos provienen de la construcción original y han sido alternadas con piezas nuevas y elementos de estuco en la composición que se aprecia actualmente.
La torre es de un solo cuerpo en planta cuadrada con una luz rematada en medio punto en cada cara y remate de pequeña cúpula sobre un corto tambor de planta octagonal, todo ello de construcción más o menos reciente acabada en aplanados y recubrimiento de mosaico veneciano.
El acceso al interior es lateral mediante un cancel al sotocoro desde donde se extiende la planta rectangular de la nave en la misma amplitud hasta el presbiterio separado por tres escalones y un arco no estructural, ya que la cubierta de todo este espacio es de una losa a dos aguas apoyada en los muros laterales. Hacia el lado norte se abren directamente una capilla lateral de buena amplitud y similar sistema constructivo y desde el sotocoro otra antigua capilla actualmente con funciones de bodega. El coro está apoyado en una estructura de concreto armado con un arco simulado y un pretil, más que pasamanos, del mismo material. Tiene su acceso por una escalera exterior.
Desde el presbiterio y la nave, dos puertas comunican con los espacios de sacristía y servicios, en mal estado, acondicionados provisionalmente en locales antiguos de espesos muros de adobe y cubierta de envigado de madera. A dos de estos locales de considerable altura se les han acondicionado entrepisos de madera en forma por demás defectuosa.
Los espacios dedicados a sacristía y servicios tienen salida al exterior a un espacio libre, a modo de patio que tiene comunicación directa con el atrio hacia el poniente y está limitado hacia el sur por una serie de locales en ruinas y sin uso actual con grandes ventanas enmarcadas que abren hacia la pequeña plaza situada al sur.
5.-OBRAS DE ARTE
Pocas regiones del país han sido tan severamente afectadas por rebeliones, guerras y revoluciones durante el siglo pasado y principios del actual como la ciudad de Parral y sus alrededores. Enmedio de estas convulsiones, Santa Bárbara y su leyenda de riqueza, mucho tuvo que padecer, entre otras penalidades, la pérdida de una gran parte del acervo artístico de su templo. El propio edificio sufrió grandes daños en las guerras, su ornamentación e imaginería de alto valor casi desapareció.
Inexpicablemente quedan aún magníficas muestras de lo que debió ser un extenso y valioso patrimonio. En los locales anexos a la nave del templo, entre las semi-ruinas de estos mismos locales, sin marcos adecuados ni iluminación suficiente para su correcta apreciación, al alcance de cualquier mano destructora de buena o mala fe, se encuentran cuatro grandes pinturas de la escuela mexicana de los siglos XVII y XVIII esperando a corto plazo su restauración adecuada o su completa pérdida.
Son estos cuadros de considerables dimensiones, con una altura de dos metros aproximadamente todos ellos y anchos que van de 1.20 a 1.80 m. que representan al Bautismo de Cristo, una virgen con niño rodeados por dos santos y una santa, una virgen del Carmen y una Santa Bárbara. Los tres primeros presentan una notable calidad de factura muy superior a la Santa Bárbara. El deterioro de los cuatro está bastante avanzado.
La estatua de la santa patrona que adorna el nicho sobre la entrada es la única otra pieza de la época virreinal que se conserva en el templo. De factura artesanal y bastante deteriorada, tiene esta figura de cantera una indudable antigüedad y gran valor estimativo entre la población.
El resto de la imaginería y el mobiliario del templo son de factura reciente y escaso valor.
6.-OBRAS REALIZADAS
Se han consignado los negativos efectos que el saqueo y la destrucción han tenido sobre el templo de Santa Bárbara. No han sido más afortunados los intentos de buena fe realizados para mantener un mínimo de comodidad en los servicios religiosos, ya que la falta de una dirección adecuada con conocimientos de métodos de restauración de edificios y estilos arquitectónicos, ocasionó la pérdida de una buena parte del carácter del templo edificado a fines del siglo XVI. La falta de recursos económicos le proporcionó, además, una serie de elementos y acabados de tremenda pobreza.
Las últimas obras de supuesto mejoramiento se llevaron a cabo en la década de 1950 a 1960 y abarcaron el interior y exterior de la nave, las capillas laterales y la torre. Su realización estuvo a cargo de la parroquia con aportaciones de particulares y la feligresía en general.
Sistemas constructivos y materiales inadecuados provoaron el lamentable resultado que hoy vemos. La nave y el presiterio fueron cubiertas con losa de concreto armado a dos aguas, se simularon arcos estructurales en el presbiterio y el coro, se recubrió la torre con aplanados de mezcla rugosos y mosaico veneciano de muy vivos colores tan en boga en aquellos años, se colocó un grueso pasamanos de concreto armado al coro, la pintura interior en un tono de verde carece de la dignidad necesaria, etc.
Aún la portada de la fachada principal que, con la incorporación de piezas originales, conserva cierto carácter del templo primitivo, presenta una serie de relieves en mezcla completamente innecesarios, como el arco que la abarca por completo, que la desvirtúan en una buena medida.
7.-BIBLIOGRAFIA
ALMADA, Francisco R.
Diccionario de Historia, geografía y biografía Chihuahuenses.
Ciudad Juárez, Chih, 1968.
ALMADA, Francisco R.
Enciclopedia de México.
Ed. Enciclopedia de México. México, D.F. 1980
ARCHIVO PARROQUIAL
Parroquia de Santa Bárbara, Sta. Bárbara, Chih.
ELABORO: ALBERTO VALENCIA
FECHA: 1984
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
Santa Bárbara