Santiago Apóstol

1.-ANTECEDENTES
Diversos autores dan al vocablo Tuxpan el significado de sobre el conejo derivado de Toch-pan, que a u vez viene de Techtli, conejo y pan, sobre o arriba de. En forma distinta, Peñafiel lo deriva de Tuchtlan-Tuch-Tlan-Tuchtlan. Lugar de conejos, de Tochtli, y la Terminación abundancial Tlan, expresada por tres dientes. (1)

Poblada por otomíes y después por tarascos, ambas culturas han dejado vestigios arqueológicos en una amplia zona que no ha sido estudiada a profundidad. Existieron en ella algunos yacimientos de metales preciosos, por lo que a la llegada de los conquistadores españoles se incrementó su explotación, ya existente, y Hernán Cortés tomó como parte del Marquesado del Valle de Oaxaca al pueblo de Tuxpan para si dada su riqueza minera, y a que además de oro y plata se producían cobre y manganeso.

Durante el virreinato la región gozó de paz y tranquilidad, según lo consignan las crónicas de la época. Al igual que la mayor parte de los pueblos dependientes tuvo su hospital de indios, fundado y organizado por los frailes de la orden franciscana, iniciales evangelizadores del territorio michoacano; la misma orden seráfica manejó entonces uno de los diversos trapiches que allí existieron.

La bonanza y florecimiento de Tuxpan debidos a la explotación de yacimientos nuevos, se mantuvieron durante el periodo independiente decayendo más tarde. Durante el llamado segundo imperio, fue escenario destacado de la lucha de los juariztas por liberar al país del yugo francés, y los cinacos de origen michoacano libraron sus luchas en la región. Cuenta la leyenda que en una cueva que aun existe y que recibe el pintoresco nombre de la mano pintada, este aguerrido grupo de valientes tarascos tenían su refugio del cual partian a enfrentar los combates que se libraron durante la guerra de intervención.


2.-EMPLAZAMIENTO
El Tuxpan prehispánico no estaba situado en el sitio preciso en que hoy se asienta la población. Encontrábase la comunidad tarasca en el sitio arqueológico cercano al actual poblado, y en ese mismo lugar fué donde los padres franciscanos iniciaron la labor de evangelización de sus pobladores, transladando posteriormente la población al emplazamiento que ocupa a la fecha.

Asentada en un valle al que circundan altas montañas, Tuxpan, que es cabecera del municipio del mismo nombre, es bañada por anchos riachuelos formados por las corrientes que de ella descienden, siendo el Río Tuxpan la corriente más importante entre éstas. Se encuentra comunicada la población con Morelia, capital del estado, por medio de la antigua carretera que une a ésta con el Distrito Federal, en el tramo comprendido entre Zitácuaro y Ciudad Hidalgo, la antigua Tajimaroa, dista de ésta 19 kilómetros y 28 de la primera, recorrido que se encuentra lleno de pronunciadas curvas y fuertes pendientes.

Al cruzar el poblado, la carretera adopta el nombre de calle Zaragoza, y en ella, orientada con su eje principal oriente-poniente, se encuentra el templo de Santiago Apóstol, en la manmzana que colinda al sur con la calle Ocampo, al norte con la Romero y al oriente con la Morelos; atravesando ésta se encuentra la plaza principal del poblado, con una poco común situación de colindancia con el ábside del templo.


3.-HISTORIA
Ya se dijo que fueron los franciscanos a quienes tocó la evangelización de Tuxpan, labor ésta que en la Nueva España fuera previa a la natural exigencia de edificación de recintos religiosos, fuesen capillas, templos, conventos, y aun a la fundación de ciudades, para todo lo cual era menester la obtención de los respectivos permisos de la Corona Real mediante la expedición de cédulas especiales.

En el caso de Tuxpan, los servicios religiosos tuvieron lugar en la capilla del Hospital de indios hasta que fue construido el templo de Santiago Apóstol, hecho ocurrido con posterioridad a la erección del convento del mismo nombre, cuya primera piedra fue colocada en el año de 1599 por el Visitador provincial de la Orden Franciscana, fray Baltazar de Covarrubias. El que fuera magnífico convento fue terminado en 1608, y en él profesaron solamente cuatro religiosos a lo largo de 151 años, hasta que en 1579 fue entregado al clero secular. Así, la construcción del Templo que nos ocupa debió iniciarse en los primeros decenios del siglo XVII.

El auto de entrega del convento según López Maya en el Libro de Providencias No. 1 del archivo parroquial de Tuxpan. El contenido del documento, que el citador autor transcribe en su obra Tuxpan de la Caja 50 del Archivo Franciscano de la antigua Biblioteca Nacional, es el siguiente. El convento de Tuxpan era Curato y Vicaría, en que estaban cuatro religiosos ocupados en el servicio de dicho Curato... en dicha Cabecera de Tuxpan hay indios, y gente de razón, de estos havrá como cinquenta familia, y de indios puros como unos quarenta, cuyo idioma es el tarasco, pero son ladinos.... (2)

La erección de la parroquia de Tuxpan se debe a las dádibas munificentes de Don Manuel Orozco primero, y años más tarde a las de un hermano suyo, vinculado con los Condes de Miravalle. Fueron necesarios largos ciento once años para darle culminación a través de sucesivas transformaciones, hasta que Pedro Arrieta, su último arquitecto, le diera cuna según el estilo de su tiempo. De este Arrieta no se sabe origen ni ascendencia, El primer documento que poseemos de él es la constancia del examen que sustentó para obtener el título de maestro arquitecto, y que tuvo lugar en México en 1661 (3). La autoría de Arrieta en el templo de Santiago Apóstol se confirma en el escrito de 1720 en que se le nombra maestro mayor de la catedral de México, por muerte de Antonio De Roa (4). Se conoce también el costo de la construcción, que se elevó a los trescientos mil pesos oro. De la Maza menciona a Arrieta como autor de obras tan magníficas como La Profesa, la Basílica de Guadalupe y el Palacio de la Inquisición.

Quedo inconclusa en esa época la torre del templo, siendo hasta 1875 que el cura Salgado reiniciara la obra para dejarla como hoy se encuentra, pero el templo ya había sido bendecido el 25 de julio de 1709. El altar mayor original, tallado en madera por cuatro ebanistas llevados de la capital virreinal, se incendió el jueves de Corpus de 1825, siendo reparado por el cura Octaviano Díaz.


4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
El templo de Santiago Apóstol está antecedido por un jardinado y amplio atrio al que delimita una reja de reciente factura y sencillez lindante en la pobreza, que contrasta con el rico basamento de cantera, cortado a tramos regulares por pilares cilíndricos del mismo material coronados con exagerados remates, en que se asienta. A su costado derecho se adosa el exconvento franciscano erigido en 1608, ocupado actualmente por dependencias de la iglesia.

La fachada del templo de principios del siglo XVIII, en que su barroco, de modalidad tablerada se apoya en un soterrado clasisismo (5), es considerada por algunos autores como la obra barroca más importante de Michoacán fuera de las ubicadas en Morelia. Consta de una portada de cantera labrada sobre un muro mamposteado del mismo material, la que se conforma de dos cuerpos; el inferior se compone de pilastras tableradas y pareadas sobre altos basamentos en las que descansa un ornado entablamento en que apenas resaltan las metopas decoradas y los triglifos que lo componen; en el centro de el conjunto, una puerta con arco de medio punto finamente labrado con hojas de acanto en su extrados, y las enjutas con exhuberantes motivos vegetales, lo complementan.

El segundo cuerpo, con bellas ventanas ochavadas a cada lado, se compone de dos pilastras estriadas con entablamento caprichoso y exhuberante en ornato, sobre el que descansa un frontón roto, en cuyo centro se ostenta bello escudo bordeado por dos altos remates con decoración vegetal. Bajo el entablamento y entre las pilastras, el paño resultante es ocupado por un bajorrelieve de Santiago Apóstol ecuestre, en su advocación de matamoros, escultura cuyo movimiento en la composición y el claroscuro, pero estatismo en las actitudes, se asocian con frecuencia en la escultura colonial (6). Cierra al muro frontal una cornisa a lo largo de su remate, y una cruz de Lorena de cantera, al centro.

La torre, a la izquierda de la fachada, tiene dos cubos lisos de planta cuadrada, con una ventana en cada uno de ellos, y el campanil es de un solo cuerpo ochavado, con cuatro vanos, uno en cada cara principal, cerrado por complicada cubierta con cupulín.

La fachada lateral sur muestra, además de tres pesados contrafuertes adosados al muro, otra interesante portada dentro del mismo esquema de la principal, con un nicho en el cuerpo superior en el que se encuentra la escultura del Santo de Asís. Destaca sobre la cubierta la cúpula semiesférica con 4 ventanas y linternilla.

La única nave del templo está dividida por pilastras sobrepuestas en cinco entre-ejes; a partir de ellas surgen los arcos fajones que soportan la cubierta de bóvedas de arista. El coro alto, sobre arco de cantera y bóveda de arista, se encuentra en el primer entre-eje; la cúpula sobre pechinas ocupa el cuarto y en el último está el presbiterio, con altar neoclásico de madera. En el muro derecho del presbiterio se abre la puerta del salón de actos, y en el muro izquierdo, enmedio de una rica portada de cantera, la que comunica con la sacristía.

Por el contraste de dos elementos de cantera aparente, arcos, pilastras y cornisas, sobre el aplanado de los muros y cubierta, el espacio interno adquiere singular interés que se complementa con los altares secundarios adosados a los muros y las obras artísticas que enriquecen al templo.


5.-OBRAS DE ARTE
Valioso es el acervo artístico del templo de Santiago en Tuxpan, no tanto por las numerosas imágenes que en el se encuentran, entre las que e pueden mencionar el bello Crucificado que ocupa el altar mayor, sobre el cual aparece un pobre cuadro de Santiago Apóstol; las mediocres esculturas de un Sagrado Corazón de Jesús y una Virgen María, con las de San Martín de Porres y la Virgen del Carmen y San Victoriano. Lo que da valor a la obra artística, es el gran lienzo de Cristóbal de Villalpando que se encuentra sobre el muro derecho, conocido como el cuadro de animas. Cristóbal de Villalpando, nacido en la ciudad de México en fecha desconocida, casado en 1669 y muerto en 1714, es uno de los más importantes pintores novahispanos de su tiempo, y entre otras obras suyas pueden mencionarse. La Transfiguración de la Catedral de Puebla, El Martirio de Santa Margarita, en la catedral de México, la Virgen del Apocalipsis y la Virgen de las Angustias, y la Cúpula de los Reyes en la catedral Poblana, y la Vida de San Francisco en Antigua Guatemala.

Es el cuadro de ánimas (el) más ancho y alto de Nueva España, mide lo primero 5 metros y 25 centímetros; lo segundo 7 metros y otros 25 centímetros (7). Fue pintado A devoción del Capitán Don Pedro Manso de Abalos y de Doña Francisca de Orosco, su Mujer, según cartel en el lienzo, y la firma dice El Maestro Cristóbal de Villalpando faciebat. Año de 1708, lo que indica que fue obra de su última época.

En la composición del lienzo, y por ser cuadro de Animas; la iconografía es libre y no está sujeta a tradicionales composiciones. Cada santo puede interceder por las almas del purgatorio y ayudar a que la piedad divina se decida a ex-purgarlas y llevarlas al cielo. El donante indicaba, pues, al pintor a los santos que el creía más aptos para ello. (8)

Con una composición en franjas horizontales, preside al cuadro la Santísima Trinidad en lo alto, bajo un arco con ángeles en las enjutas. Bajo la Trinidad esta al centro Santa Teresa, en una nube, arrodillada, y la rodean el Bautista, San Nicolás Tolentino, la Virgen y San José, San Antonio y San Francisco, con San Pedro Nolasco y un prelado difícil de identificar (que)... tal vez sea San Francisco de Sales (9), a los que acompañan angelillos en su ruego por las penitentes ánimas.

En la mitad inferior del lienzo aparece el purgatorio, en cuyo centro se encuentra, bajo Santa Teresa, San Miguel Arcángel en una de las representaciones mas bellas de Villapando, rodeado de ánimas en pena, entre las que destacan la de el único niño, y el anima sola en el extremo inferior derecho del cuadro.

Transportado a lomo de mula desde México a Tuxpan este cuadro en 1708, hoy su belleza y valor histórico hace de él el principal tesoro artístico de este templo, si bien el polvo de los siglos y la incuria han opacado sus colores y amenazan su integridad.


6.-NOTAS BIBLIOGRAFICAS
1. Peñafiel, Antonio. NOMBRES GEOGRAFICOS DE MEXICO.

Pág. 224.



2. López Maya, Roberto. TUXPAN. Pág. 269 y 271.



3. IBIDEM. Pág. 275.



4. González Galván, Manuel. ARTE VIRREINAL EN MICHOACAN.Pág. 266.



5. IBIDEM



6. IBIDEM



7. De la Maza, Francisco. EL PINTOR CRISTOBAL DE VILLAPANDO. Pág. 223.



8. IBIDEM



9. IBIDEM


7.-BIBLIOGRAFIA
Peñafiel, Antonio. NOMBRES GEOGRAFICOS DE MEXICO. Editorial Cosmos, 2a. Edición. México, 1977.



López Maya. Roberto. TUXPAN. Imprenta Madero, México, 1979, Serie Monografías Municipales. VI.



González Galván, Manuel. ARTE VIRREINAL EN MICHOACAN. Frente de Afirmación Hispanista, A.C. México, 1978.



De la Maza, Francisco. EL PINTOR CRISTOBAL DE VILLAPANDO. Instituto Nacional de Antropología, Memorias IX. México, 1964.



ELABORO: ARQ. RAMON M. BONFIL



FECHA: 1985.