Nombre del Inmueble
Virgen del Rosario de Fátima
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000610
Estado, Municipio, Localidad
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-000610
Contenidos
1.-ANTECEDENTES
El territorio de Campeche actual estuvo poblado desde el primer horizonte conocido de Mesoamérica, anterior a la construcción de centros ceremoniales y a la erección de monumentos fechados (1). A fines de la época prehispánica, Calkiní formaba parte del cacicazgo o provincia de Ah Canul del sur, junto con varios pueblos que hoy pertenecen a Campeche y Yucatán. Sus habitantes sembraban maíz, recolectaban miel y sal, ahumaban o salaban pescado y comerciaban (2).
Descubierto Campeche por Francisco Hernández de Córdoba el 22 de marzo de 1517, denominaron San Lázaro al poblado existente, nombre que cambió a Villa de Salamanca de Campeche cuando el adelantado Montejo llegó ahí para reunirse con Alonso de Avila, hacia 1531. Finalmente Francisco de Montejo el mozo, hijo del mismo nombre, conquista la región y funda en 1540 la Villa de San Francisco de Campeche, somete la provincia de Ah Canul y sus fuerzas ocupan Tenabo, Helcelchacán y Pomuch, para entrar más tarde a Calkiní donde los recibe su aliado Nabatún Canché Canul.
2.-EMPLAZAMIENTO
En el barrio de Fátima enclavado en la parte norte del centro de Calkiní se encuentra ubicado el Templo de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, con su eje principal situado oriente-poniente, delimitado por una calzada sin nombre al sur, al norte la Calle 5, al poniente la Calle 24 y al oriente la 24-A.
La población de Calkiní se encuentra lindando con la línea divisoria que separa los estados de Yucatán y Campeche, sobre la carretera corta que une a las capitales de ambos estados, y dista de Mérida aproximadamente 130 kms. y 99 de la ciudad de Campeche. El poblado está asentado en una plana plataforma caliza, siguiendo una traza reticular en su mayor parte, la zona donde se aloja el templo ya citado presenta baja densidad de construcción, por lo que la zona da al templo una destacada silueta dentro de las construcciones cercanas, todas ellas bajas y con la característica construcción de tipo popular.
3.-HISTORIA
El templo que nos ocupa es de reciente construcción, no anterior al fin del siglo XIX o primeros decenios del actual, aunque no existen datos precisos de su fundación y erección, el espesor de sus muros y sus líneas generales así lo indican, ya que tales muros, aunque construidos con la piedra mamposteada y técnicas tradicionales en la región, no sobrepasan los sesenta centímetros en su ancho, en tanto que los provenientes de siglos anteriores tienen un mínimo de un metro aún en las más modestas capillas.
Si bien los elementos, materiales y técnicas usadas en el edificio responden a una secular tradición, su interpretación, obviamente de carácter popular, nos indica que ha sido erigido con la cooperación de los feligreses del barrio, herederos de la sensibilidad y cultura que sus ancestros, -creadores de grandes obras que siguen causando admiración en el presente-, como el Ex-convento y Templo de San Luis Obispo y tantas otras iglesias que los franciscanos construyeron en la región aprovechando la hábil mano de obra que los indígenas mayas legaron a los actuales habitantes del pueblo, por lo tanto elementos como la espadaña siguen presentes en la composición de estas pequeñas obras de la arquitectura popular religiosa de la península, como muestra inequívoca de una constante cultura que hace persistir la identidad propia de las comunidades en el territorio de los antiguos mayas.
4.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
Es la capilla de la Virgen del Rosario de Fátima un edificio de sencilla construcción, que se refleja tanto en el exterior como en el interior del mismo. Su situación de aislamiento respecto a otras edificaciones le confiere una mayor dignidad que la que intrínsecamente pudiera tener por su forma y dimensiones. No tiene delimitación ni barda al espacio atrial del templo, al que se accede por sencillo andador pavimentado de concreto, y del lado derecho de éste se encuentra el pretil de un pozo que rememora pasadas épocas. Una baja barda, situada al paño y siguiendo el alineamiento de la fachada principal del edificio, construida con materiales modernos y sin terminar su erección, limita hacia ambos lados al terreno en que se encuentra.
Sigue la fachada principal el esquema antiguo de los templos de la región, siendo el centro de su composición la puerta con el tradicional arco de medio punto, en la que la piedra con que se construía éste y las pilastras en que descansaba se han sustituido con el simple recurso de abultar el aplanado de mezcla, que cubre en su totalidad esta fachada, y pintándolo de color claro, blanco en este caso, que contrasta con el vivo verde que cubre el resto del muro, sistema que se repite en todas las sencillas molduras que enmarcan el perfil de la fachada. Una espadaña de dos cuerpos escalonados remata la portada, con remates periformes en los lados del arranque y en el escalonamiento del segundo cuerpo, el cual tiene un vano con arco de medio punto, igual a los tres que forman el primero sobre el cual descansa. Entre ambos, una sencilla moldura con cortinaje de mezcla los separa y adorna el liso paño.
Las fachadas laterales, sin aplanar, muestran la caliza piedra de su fábrica; en la mitad de su longitud, una puerta con arco de medio punto y marco de mezcla señalan las entradas laterales, y entre éstas y el muro absidal que es recto, una ventana alta de forma rectangular y desagradable proporción horizontal permite la iluminación del interior. Adosado al muro izquierdo de la capilla se encuentra un cuerpo que forma con ésta una L, en el cual se aloja la sacristía.
En el interior de la capilla, en la que no existe coro alto, se aprecia su sencilla planta con una sola nave rectangular y de proporción sumamente alargada, ya que mide veintitres metros de fondo por sólo seis de frente, ancho que seguramente obedece a falta de recursos técnicos para cubrir un claro mayor con la losa de concreto que la cubre, probablemente en sustitución reciente de la que quizá originalmente fuese de vigas y terrado, lo que trata de recordar con vigas transversales de concreto separadas dos o tres metros entre sí. El altar está construido con mampostería aplanada, y en él se escalonan en forma piramidal hasta tres cuerpos rectangulares, encontrándose sobre el último un nicho de madera que alberga la Virgen del Rosario de Fátima.
5.-NOTAS Y BIBLIOGRAFIA
(1). ALVAREZ, José Rogelio.- Et. Al.- Enciclopedia de México. 13 tomos. Edit. Enciclopedia de México.- México, 1978.
(2). ALVAREZ, José Rogelio.- Et. Al.- Op. cit., p.279.
ALVAREZ, José Rogelio. Et. Al.- Enciclopedia de México. 13 tomos.- Edit. Enciclopedia de México.- México, 1978.
MULLER E., Florence.- Atlas Arqueológico de la República Mexicana.- INAH.- México, 1960.
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
Virgen del Rosario de Fátima