Como el resto del casco, la capilla de Jesús Nazareno formó parte de la Hacienda Wendulain, ahora poblado Valerio Trujano.
Hacienda azucarera en sus inicios, el conjunto actualmente ha sido subdividido quedando la capilla como elemento aislado por la notificación de la zona.
La capilla es de una nave con presbiterio, cubiertos por una techumbre a dos aguas.
Su sencilla portada es un enmarcamiento rectangular del acceso, con la ventana coral y el remate triangular a manera de frontón.