Imagen principal
Clave del inmueble
MX-SC-DGSMPC-BI-000518
Nombre del Inmueble
Nuestra Señora de la Salud
Periodo legal del inmueble
Circunscripción eclesiástica
Época
Siglo XVI
Siglo de creación
Estudio Monográfico
Estudio Monográfico
Antecedentes históricos
El templo actual desplantado sobre los antiguos cúes purépechas sobre una plataforma artificial de piedra y lodo, fue fundado por D. Vasco de Quiroga a quien se facultó el 20 de Septiembre de 1537 por Cédula Real para construir su catedral en donde considerara más conveniente. Habiéndose declarado la población de Pátzcuaro como sede episcopal, se dió inicio a las obras, en base a un proyecto de cinco naves concurrentes al punto donde estaría el altar mayor, la nave central de mayores dimensiones iniciaría con una torre frontal que haría las veces de un gran vestíbulo fue iniciada por Toribio de Alcaraz, no obstante, la grandeza de la obra creó conflictos y críticas que originaron una inspección de los trabajos por Claudio de Arciniega, quien debería informar al Virrey D. Luis de Velasco el resultado de la misma.
Al sugerir Arciniega la modificación de la cimentación se provocó un litigio que retardó su avance, en 1554 se terminó y abrió al culto público la nave principal de la que se denominaría Catedral de San Salvador de acuerdo a los deseos del Obispo que no pudo verla concluida por alcanzarle la muerte en 1565, año mismo en que se trasladó la Catedral del edificio primitivo a la actual Basílica. Fungió como catedral hasta 1580, en que el Obispo Fray Juan de Medina y Rincón trasladó la sede catedralicia a Valladolid.
La deficiencia del subsuelo y los temblores dañaron severamente la iglesia. En 1682 se restructuró el cimborrio que amenazaba colapso y estaba detenido con sogas, los barrios de Pátzcuaro tributarios de la Parroquia: San Salvador, Tupátaro, Cuanajo, Tzurumútaro aportaron la mano de obra y los materiales; en 1750 el Obispo Elizacoechea autorizó la construcción de una nueva torre ya que el campanil exento estaba en pésimas condiciones, las cinco cofradías parroquiales colaboraron en los trabajos.
En Marzo de 1801 un terremoto dañó tanto la iglesia que sólo una pequeña parte podía albergar algunos fieles, en ...1805 el Cura D. Manuel Antonio Lecuona, reedificó y restituyó al culto la nave.. En 1829 el padre Lloreda informa que la pared del presbiterio estaba hendida hasta los cimientos ...y podrido el encuartonado, falseado el artesón, rajadas e inservibles 2 o 3 campanas que es imprescindible fundir y sin altar mayor por no haberse podido concluir el empezado por el piadoso vecindario... para repararse se vendió una casa y parte de la platería, no obstante, en menos de tres años reaparecieron las grietas; un nuevo terremoto en 1837 destruyó el segundo cuerpo de la torre.
En 1841 se reforzaron los muros de la nave por el Arq. José Mª Llerena mediante pilastras y arcos que marcarían altares y se construyó el primer cuerpo de una nueva torre demoliéndose la antigua, continuándose el segundo cuerpo en 1843 por el maestro Juan Ríos, dañándola un rayo al año, continuándose la obra a pesar de ello, el 1º de abril de 1845, otro terremoto casi destruyó la nueva torre siendo dañado severamente el tejado por el desplome y caida de las piedras, tres días después se repitió el sismo teniéndose que cerrar el edificio al público.
El Arq. Llerena reforzó nuevamente los cimientos, ...El 1º de enero de 1857 fue por tercera vez dedicado solemnemente el templo parroquial...por el Pbro. D. Agapito Ayala... D. Fco. Iturbe....costeó la mayor parte de esta reparación... El libro de fábrica nos dice que el 19 de Junio de 1858, apenas concluyendo la misa del Pbro. Luis Arriaga: ...comenzó un temblor que a pocos segundos se co nvirtió en horroroso terremoto, el cual derribó por segunda vez, casi todo el segundo cuerpo de la torre con su respectivo remate que hacía cuatro meses se había concluido, llevándose tras sí tres esquilas chicas, que una cayó hasta el suelo rompiendo un esquilón grande dejándolo en su lugar pero sin arco y solo en las chumaceras el otro, al caer vino mucha parte sobre el templo, quebró el tejado y artesón y destruyó el grande y famoso órgano que estaba en el coro, inutilizando totalmente tanto el bien hecho frente que lo contenía como la exquisita máquina..."
El estrépito por la fuerza del movimiento y a causa del claro que quedó en el coro, se vino abajo cosa de la mitad del tejado y artesón, no obstante que éste estaba bien hecho, desde el presbiterio para la puerta principal , pues aunque no cayó lo demás que quedó, pero quedó inservible y fuera todo de su lugar, y especialmente el tejado que quedó sobre el artesón; motivo porque puede decirse con verdad que arruinó la cubierta del templo, perdiéndose también seis grandes y hermosos candiles de cristal de los que servían de adorno; pero por fortuna los altares no sufrieron cosa mayor y únicamente el ciprés se maltrató algo; el del Sr. San José estaba cabalmente acabándose de dorar y haría poco más de dos meses se había estrenado el de la Purísima; también se destruyó el púlpito con su tornavoz que ambos eran piezas exquisitas.
La hermosísima iglesia parroquial, que fue reinaugurada con universal regocijo, con tres días de solemnísimas funciones, el 1º de enero de 1857, volvió a quedar inutilizada completamente. Los esfuerzos de clero y vecinos por reconstruirla y seguir dorando los altares a cargo del maestro Ignacio Vargas continuaron hasta que el 5 de Enero de 1867, durante la intervención Francesa en medio de la lucha entre los imperialistas y los republicanos del General Regulez una fuerte explosión y un incendio acabaron con el edificio del que solo quedaron los muros calcinados...." En 1872 D. José Ignacio Arciga, Arzobispo de Michoacán y Patzcuarense, dedicó las obras a la protección de la Virgen de la Salud, mismas que continuaron hasta 1883 en que de nuevo se consagró el templo, la techumbre se modificó substancialmente en base al diseño a manera de muelles deslizantes, este concepto se había aplicado a amplios claros de graneros por un Ing. Militar, el Coronel Emy. A partir de entonces y pese a los actuales daños que presenta no volvió a colapsar ni a quedar inutilizada. En 1898 fue autorizada la coronación con diadema de oro a la imagen de la Santísima Virgen María, bajo el nombre de La Salud., por el Papa León XIII.
En 1908 fue erigida en Colegiata por breve del Papa Pio X, que le concedió Coro y Mesa Capitular; y por último en 1924 se le otorgó la categoría de Basílica por concesión del pontífice Pío XI.
El predio en que se ubica, ocupa el lado Norte de una amplia explanada, se delimita por una celosía de tabique hecha en 1884 reforzada con pilares de cantera con ánforas de perillón en la parte alta, en las esquinas y los accesos los pilares son más anchos y están hechos de piedra en talla de almohadillado con capitel y ánforas rematadas con farolas, la entrada principal cuenta con tres rejas de hierro forjado siguiendo el diseño Art Noveau similar al cancel del sotocoro con guirnaldas que rodean el escudo episcopal.
La fachada hecha en cantera de fina talla, al igual que la torre, es neoclásica, consta de dos cuerpos con frontón triangular en el rem ate, se divide en tres calles mediante columnas alineadas a ejes; las del cuerpo bajo sobre altas basas con fuste liso y capitel papiriforme moldurado, en cuya cornisa se apoyan las columnas del segundo cuerpo desplantadas de un basamento corrido, de piedras en corte adiamantado formando recuadros; la basa es toscana y el capitel formado por veneras sostiene un esbelto tablamento moldurado que enmarca el frontón triangular del imafronte.
Las calles laterales contienen nichos de medio punto con los cuatro evangelistas cuyos nombres aparecen en pequeñas cartelas sobre ellos; la calle central sirve de ingreso a la nave, es un arco de medio punto con impostas y clave de hoja de acanto, a la mitad de las jambas se ornamenta con una flor y se enmarca en el extradós por una canaladura; en el segundo cuerpo esta el óculo moldurado de la ventana del coro, y en el mismo eje otro un vano circular más pequeño que permite iluminar el interior de la armadura. Al Sur de la nave se conserva una portada lateral, ya que la del lado norte fue tapiada por una capilla de nueva factura, hecha con acceso de arco en medio punto con impostas y jambas de alta basa con tablero remetido en el extradós y medias pilastras enmarcándolo, que modifican los paños de las columnas toscanas pareadas, de fuste liso sobre basa sin decorar, que cargan un tablamento de pesadas proporciones con friso de triglifos y metopas de cornisa moldurada que sube formando un frontón curvo trunco que flanquea una ventana con derrame al exterior. Frente a la clave pende un farol que se ve ridículo ante la fuerte proporción de los elementos arquitectónicos.
En el ángulo suroeste se ubica la torre desplantada de un amplio cubo del siglo XVIII decorado con una ventana de jambas lisas y dintel escarzano con repisón de guardamalleta, alineada con un óculo ovalado, las esquinas se refuerzan con pilastras simulando columnas toscanas cuyas molduras se extienden formando un cornisamiento sobre el que descansa el segundo cuerpo de estilo neoclásico conformado de cuatro vanos sobre basas lisas con balcón de cráteras romanas, formado por medias pilastras con arco dovelado sobre impostas, flanqueado con medias muestras estriadas de capitel toscano que enmarcan las esquinas de corte almohadillado. El tablamento tiene triglifos y metopas, sobre él desplanta la base del tercer cuerpo, de planta octagonal con roleos en las esquinas y tableros adiamantados en los paños. Desde el último colapso que sufrió, fue dejada en estas condiciones, techándose solamente para proteger el interior, cuya planta baja tiene el acceso para subir al campanario a la vez que alberga la capilla del buautisterio con un altar dedicado a San Juan Bautista, que hoy ocupa la Virgen de Guadalupe, a la que quitaron su capilla al Norte del templo para convertirla en el mausoleo de Don Vasco de Quiroga.
La nave es de un solo cuerpo con ábside semi-circular, el trazo arquitectónico es más ancho en el acceso y se estrecha hacia el presbiterio, lo que prolonga la sensación de perspectiva y la hace ver más grande, entrando en el sotocoro están las dos capillas antes mencionadas, la del Bautisterio (hoy de Guadalupe) y la de Guadalupe (hoy Mausoleo); ambas cubiertas con bóvedas de arista y altar neoclásico al fondo; opuesto al acceso lateral de la nave está una capilla nueva denominada del Sagrario.
La nave se divide en tramos mediante pilastras que continúan en arcadas de medio punto en saledizo que sirvieron para reforzar los mu ros, sobre ellas corre un balcón perimetral del que penden los candiles, en el segundo tramo están comprendidos los accesos laterales, los cuatro cercanos al presbiterio corresponden a los altares de el Sagrado Corazón, Sto. Domingo de Guzmán, San José y la Santísima Trinidad. El presbiterio está más alto y se flanquea por la sillería canongial junto a la cual están dos portadas que conducen, una a la sacristía y la otra a un anexo que se ubica hacia el lado Norte, ambas con portada de entablamento dentado sobre pilastras dóricas. Junto a ellas desplanta una escalinata de doble rampa que sigue la curvatura del ábside y remata en la parte posterior del ciprés bajo ella están una serie de cubículos de servicio, uno de ellos conserva una caja fuerte inglesa que contuvo mucho tiempo en su interior la urna con los restos de D. Vasco de Quiroga.
Al centro del presbiterio se yergue el ciprés con la Virgen de la Salud al centro, desplanta de una base escalonada con ocho columnas corintias y cúpula peraltada de gajos, sobre la cual está Jesús.
El piso es de mármol y la techumbre de cañón corrido de arco rebajado con media naranja en el presbiterio; las pilastras de los muros continúan en arcos fajones dando la impresión de estructura de mampostería, aunque se trata de un tablamento decorado a la manera neoclásica que pende de la estructura de madera hecha en el siglo XIX, y que constituye uno de los más bellos ejemplares aplicados a un edificio religioso en nuestro país, la cubierta es de teja diseñada especialmente para la iglesia, de grandes dimensiones y doble ceja de retención. Los anexos son de viguería y terrado, siendo la sacristía la única que conserva cierta calidad de diseño, así como el portal del frente. En la parte posterior al ábside circular, se rodea de habitaciones casi ruinosas, en este sitio vemos excavaciones y múltiples canteras talladas, restos de antiguas reparaciones.
El acervo de bienes artísticos es considerable ya que la imagen de la Salud es venerada en el país y en el extranjero siendo acreedora a obsequios de valor artístico o de manufactura. En la sacristía se encuentran varios óleos coloniales representando a Sta. Cecilia, San Pedro, San Juan y el Apocalipsis, etc; algunos lienzos de Ignacio Velasco y otros de Manuel de la Zerda, entre ellos el de D. Vasco de Quiroga firmado en 1755 asi como el del padre Lerín.
Planta arquitectónica (original)
Una Nave
Categoría arquitectónica
Estado, Municipio, Localidad
Nombre de la vialidad o calle
Arciga Yptal. Rayón
Número y/o identificador de la vialidad o calle
N/A
Nombre del tipo de asentamiento humano o colonia
N/A
Código Postal
N/A
Otra localización
Pátzcuaro
Tipo de uso del inmueble
Uso actual del inmueble
Orden religiosa (original)
Sin Identificar