Imagen principal
Clave del inmueble
MX-SC-DGSMPC-BI-000713
Nombre del Inmueble
Nuestra Señora de los Prodigios
Periodo legal del inmueble
Circunscripción eclesiástica
Época
Siglo XVI
Siglo de creación
Antecedentes históricos
Se le conoce también como Nuestra Señora de los Prodigios.
El poblado se encuentra a 28 kms. al suroeste de Morelia, sobre la carretera (vía corta) a Pátzcuaro.
El lugar fue muy importante para la cultura americana en general, porque allí establecieron los agustinianos, en 1538, la casa de Estudios Mayores, primera Universidad del Continente Americano, fundada por fray Alonso de la Veracruz, quien sería años más tarde, catedrático de la Universidad Real y Pontíficia de México, en 1553. Aquí estudió el príncipe tarasco don Antonio Huitziméngari, personaje que en verdad no ha recibido la atención que merece, hijo del último calzontzin Tanganxóan II, y uno de los hombres más instruidos de su tiempo. Asimismo, fray Alonso de la Veracruz, impartió la primera cátedra de filosofía que hubo en la Nueva España.
...Puestos ya nuestros religiosos en el pueblo de Tiripitío, considerándole por su plaza de armas para ordenar en él todo lo que era conveniente, para las entradas y salidas de la predicación y administración de los sacramentos, y así ordenaron que se hiciese un jacal grande, donde la gente se juntase a ser catequizada, y oír la palabra de Dios, porque para comenzar ya los religiosos tenía noticia de alguna lengua, mediante algunos naturales ladinos, que con la comunicación de los españoles que diez años había que los comunicaban, pudieron comenzar a catequizar....
Desde la época prehispánica, en tiempo del Imperio tarasco, era oficio del Sumo Sacerdote coronar al Rey con una diadema de plumas, y era la coronación en el alto monte de Tiripitío, que hoy se llama San Andrés; y aún conserva por el poniente el nombre de Canacucha. La toponomía de Tiripitío significa: lugar de oro. Según la tradición por un Sol de oro que había en el templo, en la relación hecha por el virrey don Antonio de Mendoza, lo llamaban Turipitío, o lugar negro, de turipi = negro, y el locativo o; parece derivar de tiripo = planta parásita de color del oro, que abunda en la zona.
Se localiza Tiripitío al pie del monte de San Nicolás y muy cerca se encuentra el pueblo de San Andrés, situado a 1º5330" de longitud del meridiano de México, y a los 19º3500" de latitud.
En tiempos de la conquista española, el número de habitantes de Tiripitío, ascendía a 6 000 indios y, posteriormente, en la dominación española, su vencindario se componía de cuatro familias de iberos y treinta y dos indios.
Por los años de 1537, y ya teniendo comenzada su misión los religiosos franciscanos, el virrey de Mendoza, a petición del encomendadero de Tiripitío, Juan de Alvarado, determinó que los religiosos agustinianos vinieran a predicar la religión católica, por lo que se acercaron a la comarca los frailes Juan de San Román y Diego de Chávez.
Siendo el lugar paso obligatorio de los comerciantes entre Tacámbaro y algunos puntos de tierra caliente, el sitio adquirió un auge inusitado y ya para ...el propio año (1537) se comenzó a ordenar a dicho pueblo con sus plazas y calles; se trajo el agua desde más de dos leguas de distancia, (y se hicieron) calzadas para transitar la ciénega....
En cuanto a la construcción del templo y del convento, los cronistas nos dicen: Salieron con don Juan (de Alvarado) de México nuestros Padres... así llegaron a Tiripitío... a donde fueron aposentados en las casas, de don Juan de Alvarado... Allí fué su primera mansión, hasta que determinaron hacer Iglesia y Convento; consintió en la obra Alvarado... pues por sus manos se colocaron bastantes materiales en aquel edificio, ordenó que el Convento e Iglesia fuese una misma cosa con su casa, quedando tan inmediato, que las paredes del monasterio eran tabiques de la casa de Alvarado... pasó más allá su liberalidad, diónos casi todas las tierras para el convento... para el aseo de la Iglesia nos dejó las opulentas minas de Curucupaseo, en aquel tiempo era rico real... El mismo año referido de mil quinientos treinta y siete, se trató de la fábrica de iglesia y convento, como asimismo de la planta política del pueblo, para todo se echó el nivel, si es que estuvieron medidas las grandes obras. Vinieron algunos Maestros de México, que juntos... a Nuestros... Padres... con la regla en la mano y la plomada para colocar en lo material de las obras... Dispúsose lo primero la planta del pueblo, en... sitio llano... Dióse principio a traer el agua a distancia de dos leguas... Bajaba el agua... del... monte del Calvario... en los subterráneos conductos... a una fuente, la cual fuente se dividía en cuatro brazos... El primero al Convento, el segundo al hospital, el tercero a la casa del encomendero, y el cuarto a todo el pueblo.... en medio... la Universidad, la espada de fuego lo consumió el año de mil seiscientos cuarenta... dispusieron... unas dilatadas calzadas... para transitar de las visitas... dieron principio a edificar la iglesia... Al mediodía erigieron el Convento, al oriente el Hospital, y al norte la Escuela... a el poniente el Cementerio con sus capillas... Tan grande era este atrio... que podía haber aspirado a Anfiteatro Romano...
...La iglesia... toda de cal y canto... con una portada tan soberbia y elevada... que hasta su tiempo no se había hecho otra en las Indias semejante... ...La fábrica del Hospital fue tan magnífica... sobre altos en que había varias y espaciosas salas... toda esta obra era de cal y canto... una bien dispuesta enfermería... curiosa la Botíca... Tan magnífica fue esta fábrica, que no se imitó... en otro pueblo... Acabado el gran hospital... fue la escuela y el seminario la obra que hicieron... la fábrica del convento, fue lo primero que se perfeccionó, dándosele la última mano el año de mil quinientos treinta y nueve... -durando dos años y medio la obra-, las paredes... de muy pulida cantera, cubierto de ricas maderas de cedro y ciprés... las celdas... serían hasta diez y seis... sumamente estrechas... el refectorio general, portería y de profundis... Después se labró casa mayor... un dormitorio dilatado, el mayor de toda la Provincia... el año de mil quinientos cuarenta, nombraron por casa de estudios mayores al convento de Tiripitío... De aquí tuvieron su Oriente... con que se ha regado todas las Indias Mexicanas y Peruanas y aún las Orientales, allá en la China y Filipinas...
La construcción del convento indica el grado de urgencia que la Corona tenía de poner enclaves dispuestos a proyectar formas de trabajo y conducta, benéficos para la política colonial, lo cual resulta lógico.
Un hecho importante que hay que señalar, es que ...fue la escuela de todos los oficios para los demás pueblos de Michoacán de donde le vino gran parte de su ruina, por la salidas que hacían a otros pueblos, y no volvían...
Sin duda alguna que la casa de Estudios Mayores que es estableció en Tiripitío, es reflejo de la necesidad de la población española que por aquel entonces empezaba a aglutinarse en los principales centros, ... y fue el año de 1540, (cuando) nombraron por casa de Estud ios Mayores a este Convento, atendiendo muchas cosas...
Un informe del siglo XVII al hacer referencia del pueblo que nos ocupa, dice: ... Toda esta doctrina es de lengua tarasca... (y que) el pueblo y priorato, que es la cabecera, es partido de indios y adminístranle religiosos de San Agustín... (que) el pueblo de Tiripitío, que es la cabecera, tiene treinta vecinos...
La obra monumental de fray Diego de Chávez, fue totalmente destruída por un incendio en 1640, fecha que se observa en una viga madrina del coro con el texto: Alabado sea el Santísimo Sacramento. Año 1660. Cuando fue enviado fray Antonio de Salas, quien trabajó con sombrosa actividad, consumó la obra, hacia 1676-1690.
La iglesia resultó más humilde y menos espaciosa que la anterior. En lugar de aquel espléndido artesonado que tanto alaban los cronistas, el techo fue ahora de sencillas, aunque gruesas y pulidas vigas. No fue restaurada la antigua portada, pues nos dice Escobar que, en su tiempo, solamente se conservaban cuatro magníficas columnas y ya separadas de la construcción. El monasterio fue totalmente renovado, ya que se amplió casi al doble, todo de calicanto y cantería labrada, aprovechando para ésta, varios sillares de la antígua.
La Provincia le tenía especial cariño al convento, por haber sido el primer convento agustiniano fundado en Michoacán.
Siempre se destinó a aquel lugar personal escogido. Por lo menos doce de sus priores y párrocos llegaron a ser provinciales, y muchos maestros y definidores llegaron a hacerse cargo de él. Poseía dos imágenes artísticas muy veneradas: una escultura de Cristo Crucificado, y una pintura de la Virgen María, llevadas por los frailes Diego de Chávez y Juan de San Román. Ambas fueron liberadas del incendio. Cuando fue restaurada la iglesia, retiraron del culto público la pintura mariana, con el fin de colocarla en el gran dormitorio del monasterio, donde le formaron un bello altar. Hacia 1747, cuando fray Matías de Escobar era provincial y fray Pedro de Alderete prior, la imágen fue trasladada al retablo mayor de la iglesia. Allí le repusieron solemnemente y desde entonces fue invocada con el título de Virgen de los Prodigios.
Al iniciarse en 1754 la ejecución de los decretos reales sobre secularización de las doctrinas, dejaron a la Provincia de Tiripitío con Cuitzeo. Al efecto, el 25 de enero de 1802, hubo intercambio de curas: el bachiller de Santamaría y Lozada, tomó posesión de Tiripitío.
Durante la etapa de la Independencia, San Juan Bautista Tiripitío, se vió completamente arrasado por las acciones de la guerra y daba la imágen de una triste aldea, con un total de 1 422 almas.
En el mismo siglo XIX, la casa de Estudios Mayores, volvió a desplomarse, quedando en ruinas, hasta que siendo presidente de la República, Lázaro Cárdenas, la reconstruyó totalmente, dedicándola a escuela secundaria, y destruyéndose en gran parte los vestígios que pudieran quedar de la original construcción.
El conjunto actual consta de templo, restos del claustro y escuela. El atrio que se describe por los cronistas agustinianos,ha dejado de pertenecer al templo, pasando a formar parte de la plaza pública; lo que fue monumental torre, es hoy una pequeña torrecita sin interés artístico relevante, de un solo cuerpo. La fachada de corte renacentista, sobria y bella, carece de la monumentalidad que debió ostentar en sus primeros tiempos, labrada en cantera. El acceso es através de un arco de medio punt o con casetones, flanqueado por pilastras semicirculares que rematan el primer cuerpo con un sencillo friso moldurado, continúa en el segundo cuerpo enmarcando la ventana oval del coro; junto a las pilastras se ubican nichos con veneras en cantera que albergan imágenes barrocas del siglo XVIII, ya incompletas. El remate es triangular propio de la región; en el extremo de la portada se encuentra una piedra labrada, único vestigio de magnífico cincel que debió ser parte del templo original.
El templo es de una sola nave con grandes columnas de madera que desplantan de basas de cantera, separando el espacio en tres. Los muros de cal y canto conservan tramos originales, están decorados a la manera neoclásica con pintura de aguacola. Los trabajos de esta intervención ocultan en parte el bello confesionario que se enmarca con cantera labrada de fina talla plateresca.
La techumbre de armadura de madera se cubre por el interior con un plafón de duela en forma de cañón corrido. El coro, de cierto interés, es a base de viguería labrada que se apoya en una viga madrina fechada en 1660. El piso de mosaico substituye al de medias vigas que fueron reutilizadas para construir bancas y parte del plafón del techo.
El claustro ha desaparecido casi en su totalidad, quedando sólo restos del corredor norte, en el que se colocaron arcos botareles para detener los empujes del muro sur del templo; en este muro se pueden ver restos de vigas de arrastre que sustentaban la viguería del pasillo claustral y los niveles de azotea del claustro alto, quedan también tapiadas las originales ventanas de arco conopial que iluminaban la nave. Se observan franjas de aplanado decorado al falso fresco.
Las estancias que actualmente ocupa la escuela y que debieron ser el antíguo colegio o el hospital, fueron remodeladas siendo presidente el general Cárdenas, resultando difícil determinar su originalidad, posiblemente daten del siglo XVII.
La antigua huerta, hoy reducida en gran parte, conserva ruinas de muros,y recientemente se encontró una pila de fuente con cabezas de leones, de bella talla, aunque muy deteriorada.
De las imágenes y esculturas, se conserva a la vista la de la Virgen de Nuestra Señora de los Prodigios.
Planta arquitectónica (original)
Una Nave
Categoría arquitectónica
Estado, Municipio, Localidad
Nombre de la vialidad o calle
Plaza Principal
Número y/o identificador de la vialidad o calle
N/A
Nombre del tipo de asentamiento humano o colonia
N/A
Código Postal
58344
Otra localización
Tiripetio
Tipo de uso del inmueble
Uso actual del inmueble
Orden religiosa (original)
Sin Identificar