Imagen principal
Clave del inmueble
MX-SC-DGSMPC-BI-002992
Nombre del Inmueble
San Antonio
Periodo legal del inmueble
Registro Federal Inmobiliario (RFI)
31 1687 5
Circunscripción eclesiástica
Época
Siglo XVII
Siglo de creación
Antecedentes históricos
El conjunto fue regido en capitulo de fecha 27 de Abril de 1591 pero no fue hasta después de muchos años que se dio inicio a la fabrica, La iglesia primitiva estaba construida por la capilla abierta, la cual estaba desplantada tres metros y medio por arriba del nivel del piso de la iglesia actual cogolludo refiere entre los años de 1639 y 1640 el P FR Juan Gutierrez siendo guardián del convento saco desde los cimientos de la iglesia nueva que hoy se ve, quedando en su tiempo las murallas hasta la cornisa.
La siguiente información fue tomada textualmente del Catálogo de Construcciones Religiosas del estado de Yucatán. Editado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Dirección General de Bienes Nacionales. Formada por la Comisión de Inventarios de la Cuarta Zona 1929 - 1933. Recopilado por Justino Fernández.
"SAN ANTONIO EX CONVENTO
PARROQUIA
HISTORIA. Por el año de 1549, Fr. Diego de Landa emprendió la campaña contra los idólatras en una extensa región de la Península de Yucatán, internándose en los bosques en donde éstos se refugiaban y continuaban en sus prácticas religiosas. Catequizados que fueron y reunidos en los poblados, los misioneros procedieron a construir sus humildes chozas y capillas donde ejercían su ministerio, fundando en los lugares más importantes las llamadas doctrinas.
"En el capítulo de 27 de abril de 1591 se hizo creación de los conventos de la doctrina de San Antonio de Ticul, dándole los pueblos de Muna, Zacium, Sacalum y Puztunich por de su administración". 1
Pasaron muchos años para que pudieran hacer la fábrica del convento, siendo el único dato que se tiene, la inscripción que actualmente se encuentra sobre una de las ventanas del portal de su fachada con la fecha "26 de marzo de 1624", de la que Mr. Stephens hace mención diciendo:
"... En el pavimento del gran corredor, en las galerías, paredes y techos, así de la iglesia como del convento, se ven piedras de los antiguos edificios, y no hay duda que ambos fueron construidos con los materiales que suministraban los edificios arruinados de otra raza; pero cómo, cuándo y en qué circunstancias, eso no se sabe. En la bóveda había descubierto el cura (Fr. Estanislao Carrillo) en una situación, que nadie sino él habría observado, una piedra cuadrada, con esta inscripción grabada con rudeza y grosería: 26
MARZO
1624
"Acaso se refiere, esta fecha a la de la construcción del convento; y si es así, es este el único monumento conocido que se refiere a él... " Eran los anales de los primitivos monjes escritos de su propio puño, (el citado Fr. Carrillo remitió a los archivos de Ticul al señor Orozco y Berra, una firma autógrafa de Fr. Diego López Cogolludo autor de la Historia de Yucatán)... Esperaba yo hallar en estos archivos alguna noticia, aunque fuese ligera, acerca de las circunstancias que acompañaron a la primitiva introducción por los padres del estandarte de la cruz en aquel pueblo; pero el primer libro no tenía preámbulo ni introducción de ninguna especie, comenzando bruscamente con el acta de un matrimonio. Esta acta introductoria lleva la fecha de 1588, cuarenta o cincuenta años no más de la época en que se establecieron en Mérida los primeros españoles y treinta y seis años anterior a la que se descubrió en la piedra de que hemos hablado. Mas es de presumir que el convento no se edificó sino después de algunos años de haberse comenzado a formar los archivos. Los monjes, sin duda alguna, comenzaron a formar sus registros de bautismos y casamientos desde el momento en que los hubo; pero como eran tan previsivos y prudentes, no menos que celosos en la propagación del Evangelio, no hay duda que no se resolvieron a la erección de este gigantesco edificio hasta que se establecieron de asiento en el país y comprendieron sus recursos, porque la obra no sólo era de construir esos edificios, sino de conservarlos y proveer a la subsistencia de los ministros, con arreglo a los medios de la población..."
En el mismo portal se encuentran otras dos inscripciones, una que dice: "28 de junio de 1897-R" que probablemente se refiere a alguna reconstrucción; y la otra, con el escudo franciscano, dice: "Se bendijo el 25 de septiembre de 1898 por el M. I. Sor Virio. Cplr. Mon. Dr. D. Norberto Domínguez. Siendo cura de la Parroquia el Pbro. Lic. D. Ezequiel Maestro Villarroel", y que es posible se refiera a la misma reconstrucción.
La iglesia primitiva debe haber sido construida casi al mismo tiempo que el convento, pero ésta, lo mismo que la mayor parte de las de su época, no era sino una capilla abierta (lo que hoy es el camerín) tres metros y medio sobre el piso de la iglesia actual, de modo que formaba sótanos destinados a osario.
Años después, cuando los frailes contaban con más elementos y más seguridad, construyeron la iglesia aprovechando la primitiva construcción como camerín. Para esto cerraron el gran arco de la capilla, dejando sólo el nicho para la imagen del Santo Patrón del Templo.
El historiador Cogolludo dice sobre la fábrica de la iglesia:
"Entre los años de 1639 y 40, el P. Fr. Juan Gutiérrez, siendo guardián del convento de Ticul, sacó desde los cimientos de la iglesia nueva que hoy se ve, quedando en su tiempo las murallas hasta la cornisa..."
Con el tiempo llegó a alcanzar el primitivo pueblo de Ticul, uno de los primeros lugares en importancia dentro de la península, y la iglesia y convento el esplendor que sus numerosos habitantes supieron darle; pero llegó la guerra de castas a convertir en ruinas los pueblos, y aunque los templos fueron respetados, con la imigración de los pobladores, vino la época de pobreza. Sin embargo, hasta el año de 1915, la iglesia conservaba ricos altares, joyas y ornamentos, desaparecidos durante el Gobierno del Gral. Salvador Alvarado.
El convento aunque no de los de primer orden en Yucatán, era amplio y de magnífica construcción. Abandonado durante muchos años fue convirtiéndose en ruinas, hasta acabar por desaparecer casi por completo; pues por diversas circunstancias sufrió varias mutilaciones, quedando solamente una pequeña parte reconstruida y algunos viejos muros aislados e invadidos por la vegetación tan abundante en estos lugares.
Formando un solo predio el templo y sus dependencias y el ex convento y las suyas, sin que existiera división precisa entre estas partes con destinos muy diversos, existía el inconveniente de que para los servicios del templo se tuviera que pasar por terrenos del ex convento. Para evitar esto el encargado del templo hizo una división en el portal contiguo a la sacristía y en los patios, dándose al templo parte de lo que hasta entonces era considerado como ex convento.
DESCRIPCION. Forman el predio el atrio, el templo, el ex convento y la huerta.
Atrio. El atrio estaba limitado por un pretil de mampostería hace varios años, destruido, confundiéndose ahora con la amplia plaza que lo rodea.
Templo. El cuerpo principal con planta de cruz latina, lo forma una sola nave con dos capillas formando los brazos. Sus muros son de mampostería, espesos y altos, y sus cubiertas también de mampostería, son de bóveda de cañón con arcos y cúpula semiesférica en el crucero. Al fondo, en comunicación con las capillas citadas y el presbiterio, se encuentra la sacristía, el antiguo osario (hoy convertido en paso) y otra capilla con una pequeña terraza sobre lo que fue el cementerio. Comunica la sacristía a un portal con arquería de medio punto y éste a un patio limitado por altos muros que lo separan de la antigua huerta. En este mismo patio hay otro portal en alto que precede y sirve de entrada al camerín situado sobre el osario ya mencionado.
Las bóvedas que cubren el osario y capilla son de cañón, y vaída o de pañuelo la del camerín; estando techados los portales con vigas de madera (llamadas rollizos) formando entre ellas pequeñas bovedillas hechas con mezcla de cal.
A la derecha de la entrada principal del templo está una pequeña capilla que es el bautisterio, sacada en su mayor parte del grueso del muro, cerrada con vieja reja de madera torneada y con una hermosa pila bautismal de piedra con inscripciones y figuras, toscamente labradas, en las que se nota algo de la influencia maya.
Frente a esta capilla está la entrada a la escalera de caracol de piedra que conduce al coro, estando ésta sobre bóveda de mampostería en arco algo rebajado.
Además de la puerta principal, tiene la iglesia dos laterales y una en las capillas que forman la cruz; más una ventana en el coro, cuatro en la cúpula y cuatro en la linternilla.
El piso de la iglesia era primeramente de hormigón en su totalidad, pero ha sido después cubierto casi hasta la mitad con mosaico.
El interior es sumamente sencillo, pues salvo las pilastras, arcos y las raquíticas molduras que corren a lo largo de la nave y en derredor de la cúpula que son de cantería, todas las paredes y bóvedas están cubiertas con mezcla y pintadas a la cal con algunos dibujos.
Se ha construido un retablo que cubre la pared al fondo del presbiterio en lugar de otro que existía de un gran valor artístico. Hay cuatro altares más en nichos de la nave y capillas, pero no tienen ninguna importancia como tampoco la tienen los escasos ornamentos y demás abjetos para el servicio del culto.
Exteriormente el templo es tan sencillo, como en el interior. Sus fachadas las forman grandes muros lisos en el que se ven pequeñas piedras irregulares que las forman y, como motivo principal, la portada de piedra labrada con dos pequeñas columnas gemelas de cada lado del arco de entrada; sobre estas columnas se ven dos pequeños nichos con esculturas de santos y, más arriba, sencilla cornisa y la ventana del coro, de medio punto, con marco de piedra.
Llama la atención en la portada dos piedras colocadas sobre los nichos, con medios escudos franciscanos grabados en ellas y también la clave de la puerta y los capiteles de las columnas bastante originales. Respecto a las piedras grabadas, posiblemente ocuparon, completas, algún otro lugar en la construcción primitiva, de donde fueron desprendidas para ser aprovechadas cuando construyeron la iglesia actual.
Rematan la fachada principal, sobre sencillo cornizuelo, dos pequeños campanarios en forma de espadaña, y entre ellos, un frontón curvo con angostas molduras de cantería, que en la parte princ ipal forman dos espirales. A lo largo de los muros laterales corre un pretil calado con pequeños remates y, al fondo, en la construcción primitiva, se levanta el viejo campanario de dos cuerpos y de altos y gruesos muros, en el que están las campanas en uso. Para subir a la azotea y campanario, hay una escalera detrás de la sacristía.
La cúpula, como todas las de la península, es chaparra. Se compone exteriormente, de un casquete esférico con pequeña linternilla, sobre falso tambor. En dos pretiles del crucero, a mayor altura que los de la nave, hay unos remates de cantería labrados en forma de flor de lis, en los que se nota también la influencia aborigen.
Ex convento. El ex convento, situado al norte del templo, era bastante amplio a juzgar por lo que el ya citado explorador Mr. Stephens describió de esta manera: "Únese la iglesia con el convento por medio de una galería. El convento es de una gigantesca estructura, construido enteramente de piedra, con paredes macizas y de una extensión de cuatrocientos pies; la entrada está debajo de un noble pórtico de elevadas columnas de sillería, del cual se sube por una amplia escalinata de piedra a un espacioso corredor de veinticinco pies de ancho, y que se prolonga por todo lo largo del edificio, con un pavimento enlosado, y recibiendo la luz por medio de dos cúpulas. De cada lado estaban las celdas, ocupadas antiguamente por una numerosa comunidad de frailes franciscanos. Las dos primeras y principales del lado izquierdo eran la habitación del cura, y allí estábamos alojados; otra era ocupada por el ministro y otra más todavía por un indio viejo que hacía cigarros. El resto de este lado se hallaba sin habitantes; y por el derecho, enfrente de la gran huerta del convento, todas las celdas estaban arruinadas y en la más completa desolación: las puertas y ventanas rotas, y la maleza creciendo hasta más allá de los techos. La huerta estuvo en un tiempo en completa armonía con la grandeza y estilo del edificio y hoy también participa de su misma suerte. Las norias y estanques, parterres y eras, todo está allí todavía, pero abandonado, marchando de prisa a su destrucción: la maleza, los naranjos y limoneros todo crece junto y de una manera selvática; y nuestros caballos andaban allí sueltos pastando, como si estuvieran en un bosque... 2
Actualmente del viejo convento sólo queda una pequeña parte, compuesta de un portal con escalinata hacia el atrio, tres piezas y una entrada entre el portal citado y otro más que da al patio. El primer portal y las piezas fueron reconstruidos probablemente en 1897, según la inscripción de que se habla en la historia del predio, teniendo ahora sus techos de vigas de fierro y lámina acanalada, y sus pisos de hormigón y mosaico. La entrada está techada como las piezas y con piso de losas, y el segundo portal tiene techo de madera y lámina acanalada, siendo el piso de losas.
Huerta. Detrás y hacia el oriente, quedan los terrenos de la antigua huerta con algunos muros aislados, restos de la construcción desaparecida, y el pozo donde estaba la noria para el riego. Estos terrenos abandonados, tienen, por la tupida vegetación, la apariencia de un bosque.
CONDICIONES MATERIALES. El estado de conservación del templo es bueno, pues aunque presenta algunas cuarteaduras en sus muros, sobre todo en su fachada principal, han sido reparadas en su mayor parte, no poniendo de ningún modo en peligro su estabilidad. La parte posterior o sea el camerín, por estar destinado a bo dega se encuentra sucio, pero salvo esto y la escalera destruida, el resto está bien conservado y cuidado.
Lo que queda del convento está en buen estado de conservación, menos el portal hacia el patio que tiene su cubierta de madera y lámina algo destruida.
La antigua huerta, como se ha dicho antes, está completamente abandonada."
BIBLIOGRAFIA.
(1) Cogolludo. Tomo II, página 77.
(2) Apéndice al Diccionario Universal de Historia y Geografía. Orozco y Barra. Tomo 10, pág. 565 a 567. (Trav. de Mr. Stephens).
(3) Cogolludo. Tomo 11, pág. 497.
Planta arquitectónica (original)
Cruz Latina
Categoría arquitectónica
Estado, Municipio, Localidad
Nombre de la vialidad o calle
26
Número y/o identificador de la vialidad o calle
s/n
Nombre del tipo de asentamiento humano o colonia
N/A
Código Postal
N/A
Otra localización
Ticul
Tipo de uso del inmueble
Uso actual del inmueble
Orden religiosa (original)
Sin Identificar