San Bernardino de Siena

Antecedentes históricos

Los constructores franciscanos realizaron en este sitio la construcción de una modesta capilla y el primitivo convento en el siglo XVI. Este conjunto fue notablemente transformado por la clerecía a principios del siglo XVII.
Es posible distinguir dos estilos arquitectónicos, así la actual sacristía se deduce fue la original capilla de indios y las piezas contiguas del santísimo y la sacristía.

El inmueble presenta una sección desnuda, se trata de los anexos nor-oriente del convento, aun se conservan los vestigios de la cimentación. En décadas recientes se le ha añadido una cochera en su costado norte y una bodega al sur.

La capilla que se encuentra al sur está actualmente en reparación.

La siguiente información fue tomada textualmente del Catálogo de Construcciones Religiosas del estado de Yucatán. Editado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Dirección General de Bienes Nacionales. Formada por la Comisión de Inventarios de la Cuarta Zona 1929 - 1933. Recopilado por Justino Fernández.

"SAN BERNARDINO.

HISTORIA. El historiador Cogolludo nos dice:
"En el capítulo de 5 de mayo de 1581 se hizo erección de los conventos de San Francisco de Oxkutzcab, de Junucmá con el mismo título, de San Bernardino de Tixkokob y de la Concepción de Tinum con título de Vicaría." (1)
Fue convento franciscano hasta el año de 1602, habiendo sido su último guardián el P. Fr. Alonso de Solana, y tenía como visitas a los pueblos de Tixpeual, Euan, NoIo, Ekmul y Yaxkukul.

El mismo historiador Cogolludo, dice:

"Por auto de 29 de enero de 1602 las cuatro doctrinas de Hocabá, a Tixkokob, lchumul y Tixchel (ahora Popolá) que pertenecían a los religiosos, pasaron a poder de la clerecía." (2)
En la relación de la visita del P. Ponce el año de 1588, encontramos:
"...y ese mismo día (13 de agosto) llegó al pueblo y convento de Tixkokob. Es este pueblo de mediana vecindad de indios mayas; el convento es una casita pequeña, con el claustro y aposento bajos, muy pobres y humildes aunque hechos de cal y canto, en uno de ellos tienen el Santísimo Sacramento, y sin esto hay en el patio su capilla y ramada para los indios, la huerta del convento aún no estaba cercada sino de palos y había pocos árboles y hortaliza que se riegan con agua que se saca de un pozo, con cierta invención a manera de anoria. Moraba en aquel convento un solo fraile viejo." (3)
La construcción del templo actual, según la inscripción que se encuentra sobre su entrada principal, data del año de 1704, habiendo sido hecha por el clero en cuyo poder estaba entonces.
Durante el gobierno del General Alvarado, en 1915, fue destruido el pretil enverjado que cerraba el atrio, y demolidas varias piezas que, en estado ruinoso, se encontraban en el ángulo noroeste de la casa cural. La verja de fierro del atrio fue trasladada a Mérida, encontrándose ahora en la llamada Escuela de Agricultura en el barrio de Chuminópolis.
Por los años de 1884 a 1885, existían en la esquina suroeste del predio unos portales dedicados a mercado de carnes, que eran propiedad del municipio. Junto a los citados mercados, hacia el poniente, había una pieza, la cual tenía una fracción de terreno que le servía como patio. El ayuntamiento mandó demoler esa pieza para ampliar el mercado hasta donde se encuentra en la actualidad.
Por la situación que ocupan en relación con el predio, el citado mercado, llamado "Manuel Romero Ancona", y la casa situada en la esquina de las calles 18 y 21, se presume que tan to el uno como la otra, están en terrenos que pertenecieron al cementerio, huerta y casa cural.

DESCRIPCIÓN. Componen el predio: el templo, la casa cural, el ex cementerio y la huerta.

Atrio. El atrio situado al frente y costado del templo se encuentra ilimitado. Apenas existen en él algunas huellas del pretil que lo cerraba, y los restos de 3 pasillos, antes enladrillados, correspondientes a las entradas del templo. Dentro de sus límites, hacia el norte y cercano a la casa cural, se encuentra un pozo abandonado.

Templo. El templo es de mampostería, en una nave dividida en cinco tramos, por arcos que descansan en sencillas ménsulas a la altura del arranque de la cubierta. Esta es de bóveda de cañón en 4 de dichos tramos, cubriendo el otro, que precede al presbiterio, una cúpula semiesférica con pechinas y linternilla.
En el último tramo, al fondo está el presbiterio al cual se tiene acceso por una pequeña escalinata con cuatro columnas. En sus muros laterales hay dos ventanas altas tapiadas, y en el fondo se encuentra el altar mayor con mesa de mampostería y, gradas de madera. En lo alto de este muro hay dos pequeños ojos de buey, por donde recibe la única y muy escasa luz que tiene.
En el primer tramo, junto a la puerta principal, existe el coro sobre bóveda de cañón muy rebajada, con barandal de fierro y escalera de caracol de cantería que se prolonga hasta el techo. En este mismo tramo, en el costado sur, existe el bautisterio en pequeña capilla abovedada.
En los muros laterales, desde el coro hasta el presbiterio, hay una serie de nichos o pequeñas capillas sacadas del grueso de estos muros. En ellas están algunos altares y las dos puertas que, con la principal, dan acceso al templo.
Detrás del presbiterio hay una pieza techada con bóveda de cañón que es la sacristía, y en los extremos de ella, otras dos más en iguales condiciones destinadas a los servicios de la misma.
Todo el interior del templo está pintado de aceite, los pisos son de mosaico y granito artificial en el presbiterio, de cemento en el coro y de ladrillo de barro vitrificado en el resto. La sacristía y las dos piezas contiguas a ella están pintadas a la cal y sus pisos son de ladrillo.
Los altares y el púlpito no tienen ninguna importancia y los ornamentos, útiles, etc., son muy pocos y de escaso valor.
Exteriormente, la fachada principal es muy sencilla, encontrándose en el alto y liso muro, la puerta con arco de medio punto y el balcón del coro. A los extremos se levantan dos torres de dos cuerpos y planta cuadrada, y un remate compuesto de 3 escalones y un pequeño casquete esférico. Tiene cada cuerpo 4 arcos para alojar las campanas, un sencillo cornisuelo y 4 remates en las esquinas.
Ligando las torres hay un frontón curvo, con dos pequeños tramos de balaustrada, 3 remates piramidales y un escudo pontificio en el tímpano.
Los muros laterales son completamente lisos, y el del fondo presenta dos ojos de buey y varios remates escalonados con una cruz en el centro.
La cúpula, por fuera, se compone de un falso tambor cuadrado con el casquete esférico, y la linternilla con sus cuatro pequeñas ventanas tapiadas.

Casa cural. Al noreste del templo se encuentra la casa cural, de un solo piso de mampostería. Se compone de cuatro crujías, rodeando un patio con tres corredores, y en la esquina noreste, hacia el oriente, dos crujías más.

En las cuatro crujías primeramente citadas se encuentran 11 piezas, una de las cuales, sobre el atrio, sirve de en trada. De estas piezas, 4 se encuentran destechadas, conservando las demás sus techos de vigas de madera. Los corredores tienen sencillas arcadas, y están dos de ellos techados con vigas de madera y uno con lámina acanalada.
En las otras dos crujías se encuentran dos piezas techadas con vigas de madera; dos destechadas y los muros del resto de la construcción ya en estado ruinoso.
Las paredes de las piezas útiles están pintadas a la cal, y sus pisos son en unas de mosaico y en otras, de ladrillo y cemento.
Ex cementerio. Al sur del templo se encuentra parte de lo que fue el cementerio con barda de mampostería hacia el atrio y huerta; y en su extremo sur, una pequeña pieza techada con lámina que se cree fue la capilla.

Huerta. El resto del predio, al oriente, lo forma la huerta cercada con barda de mampostería y en completo estado de abandono. En ella existen tres pozos, habiendo estado en uno de ellos la noria para el riego y junto a él, los restos de un estanque.

ESTILO DE LA ARQUITECTURA
La primitiva capilla y modesto convento franciscano hechos en el siglo XVI, posiblemente fueron transformados al pasar a poder del clero en los primeros años del siglo siguiente. La parte que en el templo actual sirve de sacristía, bodega y pieza del cura párroco, tiene todas las características de las construcciones hechas en el primer siglo de la conquista, por lo que es de suponerse sea la más antigua.
Distínganse estas piezas de las demás por sus gruesos muros y sus techos de bóveda con la particularidad, de ser más alto el de la pieza central que tiene además un gran arco cerrado sirviendo de fondo al presbiterio.
Esta disposición hace pensar que la actual sacristía fue la primitiva capilla de los indios, citada por el P. Ponce, y las piezas contiguas a ella la Sala del Santísimo Sacramento y sacristía de la mencionada capilla.
El templo construido por el clero y terminado a principios del siglo XVIII, es del tipo único empleado en Yucatán, notándose en él la sencillez netamente franciscana y el estilo propio del siglo mencionado. La bóveda de cañón reforzada por arcos intermedios, la cúpula, las capillas o nichos laterales y las torres lo comprueban.
La casita pequeña con claustro aposentos pobres y humildes que conoció el citado religioso franciscano, no parece ser la misma casa cural de ahora, pues su disposición y estilo no es el comúnmente empleado por esta orden. El edificio es ciertamente pequeño comparado con muchos otros de la misma índole, pero su claustro no es el claustro franciscano de espesos muros y estrechos corredores abovedados, ni los aposentos son como los que servían de asilo a los pobres y humildes misioneros del siglo XVI. La pequeña casita fue totalmente reformada al pasar a la clerecía, construyéndose posteriormente la actual.

CONDICIONES MATERIALES. El atrio está sin pretil que fue destruido. El templo se encuentra en buen estado de conservación. La casa cural tiene varias piezas destechadas y una parte en ruinas. El ex convento y huerta se encuentran abandonados, y se presume que parte de ellos ha sido invadida."