Imagen principal
Clave del inmueble
MX-SC-DGSMPC-BI-001743
Nombre del Inmueble
San Pedro Apóstol
Periodo legal del inmueble
Circunscripción eclesiástica
Época
Siglo XVI
Siglo de creación
Antecedentes históricos
En 1579 el escribano Gonzalo Hernández al describir el pueblo de Xiquilpa dice que en dicho pueblo hay "...frayles de la orden del Señor San Francisco, donde ay de ordinario un guardian con otro compañero. Deste dicho pueblo de Xiquilpa de sus quatro sujetos... uno se dice ... Ocumicho, sujeto al dicho pueblo.. dizese Ocumicho porques "tierra de muchas tuzas", es tierra fria por estar poblados de unos montes e tierra alta, danse higos, membrillos e duraznos ...Los pueblos de Patamba, Iopen, es visita de frailes franciscanos..."
En el siglo XVII cuando se describen las Doctrinas y guardianías de franciscanos se nombra Patamban, el texto dice: "...El pueblo y guardianía de Patamban es doctrina de indios y administranle religiosos de San Francisco..." dependiente de este lugar estaban el pueblo de San José y el de San Pedro Ocumicho que "...tiene de cuenta sesenta vecinos. Serán ciento cuarenta..." agraga también "... los indios de esta guardianía son tarascos y se administran en su lengua materna..." respecto a sus hospitales informa que "...el hospital de San Pedro coge treinta fanegas de trigo de temporal y otras tantas de maíz..." En 1765 el visitador informa que el pueblo de Patamban "...para pagar sus emolumentos anuales, hace un cuerpo con los otros dos de Cumicho y San Joseph [de Gracia] porque seon de tasación y alternadamente por semanas entraa su tasación..." referente a Ocumicho como dependiente de la cabecera de Patamban dice "... dista de este Patamban cerca de dos leguas para el oriente, camino montoso de pinería, los indios que lo componen son como 350, que ha dejado la epidemia, de confesión.
Su iglesia y casas curales son de piedra y lodo viejo. Su ornato es un colateral mayor y otros dos pequeños, todos viejos.
El edificio que hoy vemos fue construido en el siglo XVI por la orden de San Francisco que evangelizó desde Peribán, aunque a sufrido serias modificaciones conserva algunos elementos de la primitiva fundación como es el paramento de proporción cuadrada que conforma la fachada. La portada que ocupa la parte central de la misma está conformada por un arco de medio punto de gruesas dovelas profusamente labrado en tallas planimétricas tipo sello mostrando motivos vegetales en el extradós, que se delimita con un cordón franciscano en el intradós. Descansa sobre capiteles con doble listel y flores de cuatro pétalos en el friso denotando similar trabajo a las demás portadas de la orden en la región serrana como son Uruapan o San Lorenzo. Las jambas considerablemente anchas también presentan guirnaldas floridas y tallas en listel acordonado con lises formando cenefas verticales que remarcan en vano a los lados. Las basas son cuadradas coronadas por molduras toscanas; posiblemente estuvo inserto en un alfiz ya inexistente. Se flanquea por dos medias muestras de fuste liso y capitel cúbico que soportan una cornisa propia de un entablamento ya inexistente con molduras en dentículos, sobre la cual dos almenas de pináculo rematan a eje de las pilastras.
La ventana del coro de jambas tableradas con basa y capitel toscano soportada la doble arcada del vano ajimez que presenta tres oquedades que debieron contener platos o circulos de obsidiana, un friso dentado lo delimita con dos almenas apuntadas y una cruz al centro; el paramento es liso pintado de blanco sobre aplanado terciado, remata en su parte superior con una viga madrina sobre la que se apoyan los canes que soportan la cubierta de tijera a cuatro aguas.
El atrio es un amplio espacio delimitado por una barda de adobe carente de recubirmiento, con algunos árboles de fronda que le dan una agradable apariencia pese a que se han colocado planchas de concreto remarcando el andador entre el acceso atrial y el de la nave, cuyo frente se vestibula por tres escalones y un empedrado en el que estos desembocan; al centro del mismo sobre tres escalones decrecientes creando ua pequeña pirámide desplanta la base cuadrada coronada por una cornisa que contiene la cruz atrial de doble brazo flanqueada por cuatro almenillas apuntadas colocadas en las esquinas de dicha cornisa.
La torre es de nueva factura hecha con tabique y concreto armado, el templo no contó con este elemento en sus inicios, la Inspección Ocular nos dice que las campanas se sustentaban de varios maderos excentos de la iglesia; es un sólo cuerpo y en cada una de sus caras presenta vanos ajimeces similares al que vermos en la fachada principal de donde seguramente fue copiado; bajo el mismo, vemos dos veneras flanqueando un óculo que fueron puestas en el lugar y obviamente provienen de la portada original; sobre este único cuerpo del campanario un elemento cerrado contiene las carátulas de un reloj y se ornamenta con almenas apuntadas. La torre está aplanada y pintada en su cara frontal y muestra el tabique aparente en las restantes.
La nave es de un solo cuerpo, de planta rasa y ábside plano, se refuerza por el exterior por gruesos contrafuertes cónicos que aún conservan vestígios de aplanados con acabdos de enlucido y una cruz en el vértice superior; los muros son de piedra con mezcla de lodo y se encuentran aplanados y pintados de blanco en ambas caras protegiéndose en los paramentos interiores por un lambrín de madera; dos ventanas en el presbiterio proporcionan al interior una deficiente iluminación, ya que sólo son auxiliadas por otro vano a media nave a cuya altura vemos un corte vertical en el muro que denota subsecuentes modificaciones, repitiéndose este detalle en el área donde estuvo el coro ya inexistente. El piso es de mosaico y sube hacia el presbiterio frenteándose los peraltes con azulejo azul corriente, el material se cambió hace pocos años de tal modo que invade parcialmente el acceso a los anexos que vemos enmarcado por un arco de medio punto de grandes dovelas lisas sobre impostas y gruesas jambas monolíticas.
De los altares llamados por el cronista un "colateral mayor y otros dos pequeños todos viejos" ninguno se ajusta a la descripción aunque el principal conserva algunos elementos que se recolocaron después de alguna restauración al modificarse substancialmente el envigado del techo que debía albergar un remate de imafronte que al destruirse dejó la imagen estofada del padre eterno flotando de cualquier manera sobre el entablamento superior presidiendo precariamente el retablo despojado de sus imágenes originales cuyos nichos vacios se ven desolados, y los que están ocupados muestran tallas populares provenientes en su mayoría de Iuritzio.
El altar conserva su ascendencia plateresca evidenciada en sus columnas ornamentadas en los tercios de fustes estriados y los nichos enmarcados por doradas veneras; se compone de dos cuerpos y cinco calles separadas por columnas platerescas. La predela descansa sobre un basamento de mampostería y muestra profusas tallas vegetales, el diseño se repite en el entablamento que separa los cuerpos y el que sirve de remate sobre el segundo. Las calles muestran nichos rectangulares con vener as surgidas de impostas de las que penden guirnaldas y cordones salómonicos. En la calle central el primer cuerpo está ocupado por un Cristo de caña con gran resplandor a su espalda, y el segundo alberga a San Pedro Apóstol; el trabajo de carpintería se pierde con la decoración florida de la hermosa tradición purepecha de "ornamentar los ornamentos"; las calles cambian su proporción las de los extremos y la del centro conservan el mismo claro y las dos intermedias más angostas muestran pequeños nichos vacios. El diseño y esquema general de éste altar nos recuerda el de Santa María Huiramangaro.
Los altares laterales son cuatro francamente neoclásicos, dos de ellos se ubican en el presbiterio y otros dos en el cuerpo de la nave, poseen pocas imágenes pero indican claramente haber contado con un rico acervo iconológico, entre las esculturas que aún se conservan destacan las que ya reseñamos además de una Virgen con el niño; el Señor de la Pasión y la Virgen de los Dolores, un San Miguel Arcángel y una Inmaculada Concepción Procesional.
La techumbre es a base de vigas de madera sobre canes desplantados de una solera empotrada con tabicas de tablas; la separación del envigado denota así como proporción haber sido reconstruido hace poco tiempo; el primer tramo de la nave, está techado con losa de concreto armado aparente con grandes trabes, que afean considerablemente el interior. La cubierta superior es a base de armadura de tijera con vigas de par e hilera recubierta con teja. Los anexos del curato son de piedra y madera a la manera de trojes protegidas con viguería y tejas, en 1985 se estaba completando con habitaciones de tabique y concreto.
La sacristía es una habitración rectangular con muros de piedra y lodo enjarrados de adobe y encalados recubiertos por vigas planas que forman con tablones un tapanco protegido por viguería a dos aguas y teja.
Planta arquitectónica (original)
Una Nave
Categoría arquitectónica
Estado, Municipio, Localidad
Nombre de la vialidad o calle
Domicilio conocido
Número y/o identificador de la vialidad o calle
N/A
Nombre del tipo de asentamiento humano o colonia
Centro del poblado
Código Postal
60241
Otra localización
Ocumicho
Tipo de uso del inmueble
Uso actual del inmueble
Orden religiosa (original)
Sin Identificar