San José

Descripción del bien mueble

El culto a San José estuvo muy extendido en la Nueva España. En un convento masculino, parece sencillo suponer que su principal atributo era la castidad, a la que se refiere la inscripción que se encuentra en la base de la obra. San José está arrodillado, lleva la vara que floreció durante la elección del esposo de la Virgen María y un ángel está descendiendo del cielo con una corona de flores en la mano que seguramente está destinada al santo. La escena transcurre en un interior y un gran cortinado rojo se está abriendo para dejar ver a los personajes.
En el ángulo que forman los paños de la cortina, aparece la paloma del Espíritu Santo, en un amplio rompimiento de gloria. El tipo físico de José se aleja del aceptado y difundido por la iconografía local. Sin embargo sus atributos lo hacen inconfundible. La escena transcurre en un interior y es notorio el interés por la perspectiva.