Escultura que representa a Jesús, se encuentra de pie, ensangrentado, porta una peluca de cabello natural y una corona de latón. Es una escultura que viste una túnica azul de tela de manufactura contemporánea, pero no es una escultura para vestir. Tiene ojos de vidrio; porta una peluca de pelo natural y una corona de espinas elaborada en latón. El naturalismo barroco del siglo XVIII produjo una serie de esculturas dolientes muy populares entre las que sobresalen los Cristos procesionales, con posturas de un realismo que sobrepasa algunas veces los límites de la crueldad, la sangre se desborda por las heridas abiertas. Dentro de los temas pasionarios mas representados son el Cristo Rey de Burlas, El Señor de la Columna, La Crucifixión, El Descendimiento, La Piedad y el Santo Entierro. El ciclo de la Pasión de Cristo es el más representado dentro de la iconografía de la Iglesia Católica, sobre todo a partir de la Edad Media; a nivel dogmático porque es la Muerte y Resurrección de Jesucristo. Esta representación pertenece al grupo de imágenes de "El Proceso de Cristo", dentro del ciclo de la Pasión, antes del camino de la cruz y de la Crucifixión.
Observaciones del bien mueble
La pintura presenta zonas con abrasión. Los tobillos de la escultura están pegados con cinta canela. Forma parte de una serie de esculturas sobre la pasión de Cristo.
