La imagen representa a San Agustín como obispo que lleva todos los atributos: mitra, báculo y cruz pectoral. Lleva además un corazón llameante, que hace referencia a los múltiples textos de San Agustín donde habla del corazón.
El santo mira hacia arriba donde contempla a la Santísima Trinidad, lo que remite a su tratado 'De Trinitate'.