El Espacio Pictórico De Esta Obra Barroca Lo Ocupan Tres Figuras: Jesucristo, San Pedro Y Un Ángel Que Lleva Una Copa En La Mano. Cristo Está Colocado Ligeramente A La Izquierda Del Eje Central Con Nimbo De Haces De Luz. El Ángel, En La Parte Superior Derecha, Está Representado Como Un Niño Que Extiende La Mano Derecha Ofreciendo A Jesús El Cáliz. Recostado Sobre Una Roca, Pedro Duerme, Marcando La Postura De Su Cuerpo Un Eje Diagonal Que Corre De La Parte Media Derecha Hacia La Inferior Izquierda. La Fuente De Luz Es Pobre, Produciéndose Una Pintura De Tipo Tenebrista, Como Todas Las De Este Altar.
La Escena Evoca La Noche De Getshemaní, En La Cual Jesucristo Oró A Su Padre. El Momento Preciso Es En El Que Se La Aparece A Jesús Un Ángel Del Cielo Para Confortarlo. San Juan Relata El Pasaje De La Siguiente Manera: " Entonces Se Le Apareció Un Ángel Venido Del Cielo Que Le Confortaba Y Sumido En Agonía, Más Se Concentraba En Su Oración".
Toca Al Espectador Opinar Si El Dramatismo De La Escena Fue O No Captado Por El Artista Novohispano.
Observaciones del bien mueble
La pintura se encuentra en buen estado de conservación, aunque un poco sucia. Está colocada en la primera calle, primer cuerpo del retablo descrito en la cédula 13.
