El templo fue construido en 1627. Antiguamente el atrio fue usado como cementerio durante la peste de 1737. Se sabe que estuvo cerrado durante casi quince años dentro de las décadas de los sesentas y setentas del siglo XX. La portada está compuesta por un acceso con arco trilobulado flanqueado por dos pares de columnas de fuste liso con capitel dórico. En la parte superior encontramos un nicho cuadrado en donde encontramos la escultura en piedra de San Ramón Nonato. El nicho está flanqueado por dos columnas de fuste liso con capitel jónico y dos balaustres que rematan en una esfera en la parte superior.