En la parte izquierda de la obra se puede ver a San Ignacio hincado, con la mano derecha sostiene una pluma y con la izquierda un libro que reposa sobre piedras. El libro está abierto y se puede leer "Ejercicios Espirituales" dentro de él. Detrás del libro se puede ver una calavera. En el ángulo superior, sentada sobre nubes se puede ver a la Virgen vestida de alizarina y manto azul con el Niño parado en su regazo. El Niño únicamente está cubierto por un cendal blanco, lleva en su mano izquierda una vara de azucenas; ambos personajes dirigen su mirada hacia San Ignacio. Aparición de la Virgen con el Niño a San Ignacio de Loyola. En los largos meses de su convalecencia pidió que le llevaran algunos libros de caballería pero, como en su casa no los había, se puso a leer la Vita Christi de Loudulfo de Sajonia, más conocido por el cartujano y la Leyenda Dorada de Santiago de la Vorágine. Tocado por la Gracia, comenzó a meditar sobre lo que leía y a comprobar los cambios que se operaban en su ánimo, experiencia que fue escribiendo y que iría elaborando a lo largo de muchos años hasta perfeccionarla en los "Ejercicios Espirituales". En ese estado tuvo la visión de la Virgen que llevaba al Niño en sus brazos
Observaciones del bien mueble
Presenta deformaciones de soporte por falta de tensión.
