Fueron Colocados Por El Padre Figueroa Mientras Era Párroco Del Lugar, Formando Juego Con Los Altares Neoclásicos. Responden Al Diseño Clásico De Los Esbeltos Balaustres Griegos, Fijos Al Piso Sobre Un Peinazo Moldurado Y Con Pasamanos Curvo. Se Quiebran Formando Una Curva En El Punto De Transición Del Coro Hacia El Andador Perimetral Que Corona Los Muros De La Nave Sobre El Cual Se Ubican Las Ventanas.
Están Pintados Con Esmalte De Tierras Sobre Estuco, El Acabado Es Bueno Y Se Conserva En Ideales Condiciones.
Observaciones del bien mueble
Rodea los muros formeros de la nave y el límite del coro.