Imagen principal
Clave del bien mueble
MX-SC-DGSMPC-BM-000412-000193-000
Número de Cédula
193
Tipo de objeto (texto)
Cáliz y patena
Nombre o título del objeto
Cáliz y patena
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
San Jerónimo
Estudio Monográfico
Nombre del Inmueble
San Jerónimo
Autor
Anónimo
Época
s. XVIII
Siglo de creación
Descripción del bien mueble
Cáliz elaborado en plata con apliques en oro. estos elementos dorados son flores, en la base del soporte está decorado también con flores y con los símbolos del maritirio de Jesús: la cruz, una escalera con la lanza y la esponja con vinagre, los tres clavos y los tres dados con los cuales se sortearon sus vestiduras. La patena es lisa. La forma del este cáliz es ligeramente acampanada en el borde superior.El cáliz es un vaso sagrado en donde se deposita el vino que se convierte en la Sangre de Cristo. Se debe elaborar con metales preciosos. No puede ser hecho de ningún material que absorba líquidos. El soporte puede ser de otra materia. La patena es un plato redondo donde se pone la Sagrada Hostia. Debe ser de metal precioso como el cáliz y también debe ser consagrado exclusiva y definitivamente para el uso en la Santa Misa.
Observaciones del bien mueble
El material en que están fabricados los cálices fue muy variado en los primeros siglos, empleándose de igual forma la plata, el oro, la piedra ágata, el vidrio, el cuerno y la madera, según los recursos de las Iglesias o de los donantes. Pero ya a mediados del siglo IX el Papa León IV prohibió los de madera, plomo y vidrio, bastante raros ya desde el siglo VII, y a principios del XIII se suprimieron todos los que no tuvieran la copa de oro, plata o estaño, quedando también excluido este último metal en la época moderna.
La forma de los cálices ha sido variada en cada época y sirve por lo mismo para conocer la antigüedad de su fabricación. Hasta el siglo VI estaban habitualmente provistos de asas, posteriormente fue desapareciendo este accesorio y la copa se hizo muy profunda, continuaron algunos cálices aún con asas en el siglo X especialmente presentes en los llamados ministeriales y ofertorios. Desde el siglo X al XIII tomó la copa de los cálices una forma semiesférica, la cual se une a un estrecho pie, mediante un tallo corto (pues antes no tenían los cálices tallo, sino un simple nudo entre el pie y la copa) y un nudo grueso. En el siglo XIII, se observa algún desarrollo del tallo, pero siguen las formas románicas. El tipo de cáliz ojival (que se estila hasta ya entrado el siglo XVI) ofrece la copa más o menos cónica y de menor capacidad que antes el tallo se torna mas esbelto con su nudo prismático y un pie proporcionado a la copa, siempre anguloso o lobulado. En el siglo XVI, la copa de los cálices se presenta acampanada o en forma de tulipán. El pie, circular o lobulado y los adornos platerescos sustituyen a los ojivales, el pie y el nudo (a veces, doble), la cual forma sigue en los siglos XVII y XVIII pero cambiando la decoración de plateresca a barroca.
Materiales constitutivos
Oro, Plata
Técnica de manufactura
Moldeada
Alto 1
0.23
Ancho 1
0.15
Profundidad 1
0.15