Según las Actas de Pilato de los Evangelios Apócrifos, fue José de Arimatea quien pidió a Pilato que le fuera devuelto el cuerpo de Jesús "Después fue a descolgar el cadáver, lo envolvió en una sábana limpia..." (Cap.XI) y se apresuró a darle sepultura en vista de que caía la tarde y se acercaba la festividad del sábado Mayor, que prescribía reposo absoluto.
(Esto deja fuera a la Virgen de la Piedad; ciertamente su devoción surgiría en la Edad Media)
Observaciones del bien mueble
Ubicación: remate de la portada izquierda del presbiterio.