Retablo neoclásico de un solo cuerpo, sotabanco y como remate un frontón y un enmarcamiento que hace las veces de recuadro para un vano en este caso. En el sotabanco se localiza al centro una urna donde se aloja la escultura que representa la escena de la dormición de la Virgen. Al mismo eje, como nicho que aloja la imagen que representa al retablo, se abre un vano de la dimensión del cuerpo rematado por un medio punto de doble profundiad decorado a base de pequeños rosetones y en su clave la simbología mariana. Las calles laterales albergan un par de esculturas que se desplantan sobre una peana que remata con un caprichoso copete de silueta mixtilínea y decoración vegetal; dichas calles se hallan flanqueadas por una combinación de pilastra-columna ornamentadas ambas en su fuste, cajeado y con decoraciones foliáceas. la primera y estriado con nudo renacentista en su primer tercio la segunda; el entablamento que recibe, delimita la parte superior del primer cuerpo y da paso al remate del conjutno consistente en un paramento de mediana altura a los lados y un frontón y un enmarcamiento al centro.
