Representa A Santa Ana Enseñando Las Sagradas Escrituras A La Virgen Niña Que Se Arrodilla Frente A Ella Sujetando Un Libro Abierto, Viste De Rojo Con Manto Azul Y Sobre Su Cabeza Se Ve Una Aureola. La Madre Viste De Rosa Y Apoya Su Diestra Sobre La Cabeza De María, En Tanto Que Su Mano Izquierda Con El Índice Extendido Señala Los Textos; Alrededor De Su Cuello Lleva Un Velo Y Cubre Su Cabello Suelto Y Canoso Con Un Manto Café.
Esta Sentada En Un Sillón De Madera Con Una Cubierta Roja Fijada Con Tachuelones. El Piso Está Hecho En Cuadrícula Sin Respetar Trazo De Perspectiva Y Se Compone El Conjunto Con Una Cortina Que Ocupa La Esquina Superior Izquierda.
El Trazo Es Defectuoso Y El Colorido Poco Logrado, Indicando Haber Sido Hecho Por Un Pintor Popular Carente De Escuela Gráfica. Seguramente El Mismo Que Decoró La Huatapera. El Marco Que Bordea La Escena Se Prolonga Hasta El Retablo, Es El Único Que No Fue Recortado Y Confirma Nuestra Suposición De Que Contenían Lienzos En Tela, Seguramente De Mejor Calidad A Lo Que Hoy Vemos.
Observaciones del bien mueble
Ocupa la quinta calle del tercer cuerpo del retablo mayor. Ha perdido el encintado entre las tablas marcándose claramente el despiece.
