Esta sentado en una silla de madera, calza sandalias y lleva en la mano derecha un cetro, tiene puesta una peluca horrenda. Las piernas fuerón re-encarnadas, seguramente por el daño que sufrierón con el roce de los fieles. El rostro y manos estan muy dañados, los ojos fuerón sobrepuestos en forma de placa, y ya no los tiene. Requiere una adecuada limpieza y la reposición de los ojos.
Observaciones del bien mueble
Tiene el rostro muy dañado,le faltan los ojos que debierón ser de placa sobrepuesta a la talla, tiene rotos los dedos de la mano izquierda.