Cristo ya fue bajado de la cruz y envuelto en una mortaja. Varios hombres lo cargan para depositarlo en el sepulcro mientras la Virgen María permanece de pie a su lado. Es interesante señalar que la postura de la Virgen María durante las escenas de la Pasión y al pie de la cruz dio lugar a muchas interpretaciones iconográficas. En toda la serie de la catedral de Zacatecas, el pintor optó por un modelo en el cual la Virgen siempre mantiene una actitud de gran decoro. No hay grandes gestos de dolor, siempre está contenida y digna.