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Nombre del Inmueble
Nuestra Señora de Guadalupe (Santuario de Gpe)
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-001946
Estado, Municipio, Localidad
Estudio Monográfico
Clave del estudio monográfico
MX-SC-DGSMPC-EM-001946
Contenidos
1.-ANTECEDENTES E HISTORIA
El pueblo de Asientos está rodeado de varios cerros, de los cuales destacan la Bufa, San Juan, Altamirano, Peñitas y de la Cruz. Desde mediados del siglo XVI, comenzó a poblarse, pues ocurrió la noticia de que en el cerro de la Bufa se habían descubierto vetas minerales. El primer impulsor de importancia de la actividad minera fue Diego de Ibarra, considerado por ello, aunque no vivió en el poblado, su fundador. Pero la vida de Asientos hasta fines del siglo XVII se caracterizaba por reunir a unos cuantos buscadores de oro y algunas decenas de indígenas que trabajaban para ellos. Aunque ya había recibido el título de Real de Minas, fue hasta principios del siglo XVIII que comienza su verdadero crecimiento.
El potosino Agustín Mejía descubrió ricas vetas que bautizó como la Limpia Concepción. Al morir, en 1712 aparece Benito Gaspar de Larrañaga, quien compra la mina, más conocida como Descubridora. (1) Si la historia de Asientos gira alrededor de la minería, ésta no puede abordarse sin mencionar a los Larrañaga, quienes impulsaron su primer gran auge y contribuyeron a edificar los dos templos con que cuenta. La importancia de la minería puede medirse por el hecho de que entre 1712 y 1727 las actividades de beneficio y extracción generaron un consumo de 3981 quintales de azogue (mercurio) y una producción de plata de 497 314 marcos.
Aparentemente la bonanza no duró, aunque siguieron explotándose algunas minas. Para 1794 había cinco minas de plata en actividad, tres de ellas propiedad del conde de Regla, una del conde de Medina y otra de Antonio Otaegui, y seis de cobre entre las que estaban las de Francisco Velarde.
Para 1804, empleaban a 1100 hombres en 36 tiros, 7 haciendas para el beneficio de la plata y 12 factorías de fundición de cobre. En realidad, este momento se ubica dentro del auge general de la minería en el país, que se inició en la década de 1780. De todas maneras, el beneficio del mineral se hacía primitivamente, en su mayoría por rescatadores que disponían de pequeñas instalaciones para la refinación y que compraban el mineral en la boca de los túneles. Esta etapa terminó con la guerra de independencia, la cual paralizó los trabajos.
Hacia 1825 se reiniciaron algunas labores, gracias a la asociación del Marqués de Guadalupe con un español de apellido Liaño, pero éste último fue expulsado del país, y no se completó el desagüe y destierre. El marqués abandonó la empresa en 1831. Otro minero, Rafael Carrera, retomó los planes y por un tiempo trabajó en la Descubridora y la Santa Francisca, pero también abandonó su empeño hacia 1851. Pasaron largos años y en 1881 se forma la Unión Restauradora del Mineral de Asientos, a iniciativa del ex-gobernador y senador de Aguascalientes, Ignacio T. Chávez, que administraba cuatro pertenencias de 4 hectáreas cada una. En ese mismo año Miguel Velázquez de León distinguió 9 vetas. Entre 1880 y 1884 estas minas producían mineral con leyes de entre 4 y 6 por ciento de cobre y 2 y 2.4 onzas de plata por carga de 138 kilogramos. El promedio de extracción semanal andaba por los 40,000 kilos. Sin embargo, en la década siguiente la situación empeoró tanto que entre 1887 y 1892 se produjo en todo el estado la mínima cantidad de 180 kilos de plata.
Sin embargo la época de verdadero auge estaba por llegar, impulsada por el gobierno de Porfirio Díaz. Bajo el lema de orden y progreso, su largo régimen se caracterizó por abrir las puertas del país al capital extranjero, pensando q ue esa era la única forma de impulsar las actividades industriales, mineras y comerciales, y por lo tanto, el desarrollo de México.
La firma que aprovechó esas oportunidades en Aguascalientes fue la de los hermanos Guggenheim, quienes crearon un poderoso imperio minero. Su actividad en Asientos creció ininterrumpidamente a partir de 1896. Llegaron a poseer 16 minas, entre las que se encontraba la Santa Francisca, la de mayor productividad en lo que se refería a la plata. Creció tanto la producción en Aguascalientes, sobre todo en Asientos y Tepezalá que se pasó de las 22 mil toneladas en 1897 a las 70 mil en 1907, y el número de trabajadores ocupados en el ramo llegó a ser de unos 1500. Por desgracia toda esa riqueza no se quedó en la República. Los Guggenheim eran dueños de los ramales del Ferrocarril Central que llegaba a Asientos y Tepezalá, y por ese medio transportaban el mineral para su beneficio a la Gran Fundición Central Mexicana, instalada desde 1895 en las afueras de la capital. Posteriormente exportaban el metal a los Estados Unidos. Eran millones de pesos los que salían del país de esa manera, pues sólo la plata producida por la Fundición en 1907 fue de 436 kilogramos.
La nueva bonanza minera decayó con la revolución, sobre todo a partir de 1913, y finalmente cesó la actividad y se marcharon los Guggenheim en 1923. El pueblo quedó igual que antes de su llegada, desolado y pobre. En 1960 nada más continuaba en explotación una mina, la de el Orito. De su antigua grandeza nos dan una idea los templos religiosos y otras construcciones civiles que se conservan actualmente. (2)
La erección de la capilla de Guadalupe está vinculada a la familia Larrañaga. Por una información recavada por orden de Juan Ignacio Larrañaga el 28 de septiembre de 1726, ante el teniente de Alcalde Mayor Andrés Francisco Serrano, y actuando como escribano público y de cabildo el de la Villa de Aguascalientes, Baltazar de Aguilera, es así como se menciona su existencia. Aparentemente su construcción fue terminada por 1765, en gran medida gracias a la aportación monetaria legada por el cura Tadeo Bueno de Bessori. Además, existen otros indicios de su antigüedad y de que se trataba de un sitio muy concurrido. (3)
En 1804 fue concluído un puente que une la capilla con el centro de la población, que se encuentra al norte. El camino para llegar a la misma atraviesa uno de los sitios de interés de la ciudad como es la alameda, que está a dos calles de la plaza y lleva el nombre de Rangel, conservando así el nombre de quien tuvo la iniciativa de construirla hacia 1818 o 1850. (4)
Sobre el puente que hemos mencionado, se colocó una pequeña ermita que remata un nicho con la Virgen de Guadalupe. En este puente los inspiradores de la obra escribieron un soneto, que data del 18 de agosto de 1804, el cual firma Placencia Larrañaga y Castellanos.
La primera imagen de Nuestra Señora de Guadalupe que se conservó en la iglesia fue obsequiada por uno de los párrocos a fines del siglo pasado, por 1960 se encontraba en propiedad de Eloísa Moreno, vecina de Asientos.
El templo tiene dos construcciones anexas. Una de ellas estaba destinada a habitación de religiosas y otra a Escuela Parroquial. En la parte trasera se encuentra un panteón clausurado y al frente una cancha de basquetbol, inaugurada el 23 de enero de 1963. (5)
2.-EMPLAZAMIENTO
El santuario de Nuestra Señora de Guadalupe se encuentra situado al norte de la población, el terreno tiene poca pendiente y es relativamente plano, a pesar que Asientos de Ibarra está localizado en donde se inicia la sierra y muy cercano a la zona de minas. Los alrededores son totalmente áridos, sin embargo en época de lluvias un arroyo divide la zona donde se localiza el santuario del centro de la población, por lo que hubo necesidad de construir un pequeño puente que actualmente fue absorbido por construcciones posteriores y que solamente se destaca por una leyenda con la imagen guadalupana que existe al centro de él.
El santuario tenía una barda atrial con una portada de estilo neogótico con tres entradas al frente y a los costados a base de arcos trilobulados y pretil alrededor, según información oral del actual sacerdote, pero en la década de los años cuarenta se demolió y posteriormente se construyó la cancha de basquetbol que aún existe.
Al frente de esta cancha va descendiendo el terreno, formando una gran explanada poco arbolada que está rodeada por casas habitación tradicionales que enmarcan la iglesia con un entorno adecuado.
A la izquierda de la iglesia se encuentra la casa cural la que se comunicaba con el templo por una puerta que se encuentra en la capilla anexa. Esta capilla se ilumina a través de una ventana que se abre hacia el patio interior de la casa cural.
3.-DESCRIPCION ARQUITECTONICA
El conjunto está formado por un pequeño atrio, el templo y sus anexos; el templo se encuentra al centro de lo que se llama Casa grande (a la derecha) y la Casa chica (a la izquierda); está muy bien conservado y el juego de los muros aplanados y pintados en blanco, con los marcos de cantera de puertas y balcones.
La fachada principal de la iglesia es muy sencilla, con un arco de medio punto bordeado por cantera labrada, el cual lleva en la parte superior un balcón que pertenece al coro con un delantal barroco de piedra. Esta fachada es la única aplanada y remata con un frontón triangular abierto que a su vez tiene un nicho al centro. La torre, a la derecha, también muy sobria, es de cantera, con un solo cuerpo alargado, de planta cuadrada y vanos con arcos de medio punto en sus cuatro costados, tambor cilíndrico, cupulín, linternilla y una cruz metálica.
El templo está orientado de sur a norte, el coro coincide con el primer entreje y tiene una barandilla de madera torneada, es de una nave y seis tramos; todo está decorado con austeridad, y exclusivamente entre las pilastras de los muros laterales se encuentran pintados al óleo sobre los aplanados, grandes cuadros con las figuras de los apóstoles. Al fondo está el presbiterio, que es de planta rectangular; se encuentra bajo el arco que limita la bóveda, una pintura semicircular que representa la Crucifixión. Esta obra sí es de factura colonial, pero no los murales de los apóstoles.
En el presbiterio existe un altar muy sencillo de corte neoclásico muy popular al que se ha adosado posteriormente un triple arco al frente, ejecutado en madera, con arcos trilobulados de estilo neogótico que obstruyen la vista del óleo superior mencionado anteriormente. Este óleo debe haber sido parte de una composición anterior que probablemente fue destruida y de la que sólo quedó esta pintura, ya que no forma parte del conjunto actual. A la derecha del presbiterio existe una bella portada con un remate superior a base de un arco mixtilíneo que se repite en varios planos, provocando una sensación de diseño muy fino y refinado.
La cubierta del templo es a base de una bóveda de medio cañón reforzada en cada tramo por arcos fajones que se apoyan en pilastras de cantera labrada. Esta bóveda tiene a todo lo largo penetraciones laterales de otras bóvedas de cañón a un nivel más bajo que forman lunetos y permiten la colocación de ventanas rectangulares a todo lo alto del recinto. Este sistema de bóvedas está sostenido por los muros longitudinales del templo y ayudado por los contrafuertes exteriores que van a cada lado de la nave, están decoradas por sencillos trazos que remarcan las aristas de los lunetos, uniéndose al centro con círculos de argamaza realzados de donde penden candiles con prismas de cristal.
La sacristía consta de dos bóvedas de arista separadas por un arco que se apoya en medios capiteles en ambos lados. Junto a la sacristía y comunicado por una puerta al centro de ésta, se encuentra otro local cuyo destino dentro de las actividades del santuario se desconoce, pero de dimensiones semejantes a la sacristía, que en este caso es bastante amplia para las dimensiones de la iglesia. Este local a diferencia del templo y la sacristía no es de piedra sino de adobe, de un tipo de construcción rústico, con bóveda de medio cañón y erigido en forma separada de la iglesia pues sus muros se ven independientes de ésta; ello hace suponer que puede haber sido la primitiva capilla, desplazada después por otra mayor, que es la que funciona actualmente.
A través del local anterior, se puede tener acceso a lo que fuera hospicio de niñas, que es una construcción amplia erigida alrededor de un patio porticado con arcos de medio punto, que actualmente se acondiciona para centro de desarrollo de la comunidad.
A la izquierda del templo, a través del tramo que queda antes del presbiterio, se abre un gran arco por el que se comunica a un local al que actualmente se le llama capilla, techado con una bóveda de medio cañón, pero muy rebajada, con dos arcos intermedios que la refuerzan. Este local se comunicaba con un singular pórtico posterior a través de una puerta actualmente tapiada. El pórtico de referencia es parte de todo un conjunto sumamente especial que en su totalidad se dedicaba a panteón, estaba dividido en una sección para entierro de los sacerdotes, a un lado, una serie de criptas verticales y pequeñas y al exterior para el entierro de los niños; frente al pórtico hay un recinto cuadrado y elevado al que se asciende por una escalinata, que estaba dedicado a entierro de adultos en general; la mitad para las gentes de razón y la otra mitad para los naturales.
La división entre unos y otros era una barda con una torrecilla hueca, techada con nervaduras formando un cupulín abierto que funcionaba como osario. Esa plataforma tenía alrededor una balaustrada de cantera con un Vía Crucis intercalado que se rezaba por una calzada inferior que rodeaba la mencionada plataforma y que estaba limitada por una barda con respecto al exterior. El pórtico, techado en igual forma que la capilla anexa, presenta dos contrafuertes formados a base de arcos botareles, que compensaban la presión de las bóvedas hacia el exterior. Estos arcos fueron reconstruidos recientemente pero no existe la seguridad de cuál haya sido el trazo original.
4.-OBRAS DE ARTE
El templo nada conserva de todo su patrimonio artístico y no sería aventurado pensar que hayan tenido que ver en ello las grandes compañías extranjeras que explotaron las minas de la región durante el fin del siglo pasado y el principio de éste, pues para ellos representaban obras de arte fácilmente adquiribles, sin control alguno en aquella época y no apreciadas por los propietarios en tiempos en que sólo lo de gusto francés era considerado valioso. Solamente existen sobre los aplanados del pórtico que da hacia el camposanto; en el mayor, se representa el juicio final y está en muy buen estado, otro más pequeño, sobre la puerta que comunica con la capilla anexa al templo, se representa la Gloria; además en los otros muros se dibujaron leyendas y citas enmarcadas en óvalos, relativas a la muerte, todo dentro del colorido y diseño popular del siglo XVIII. El mural de la Gloria está inspirado en el óleo que existe en el fondo del presbiterio y que es seguramente anterior al pórtico. El óleo obscurecido y semioculto debe ser del siglo XVIII pero su calidad es difícil de apreciar debido a lo elevado de su colección.
Los murales al óleo de los apóstoles fueron ejecutados a principios del siglo (1902-10) por Teodoro Ramírez en el clásico estilo académico predominante en esa época. El único óleo de caballete que se conserva es una copia de la imagen de la Virgen de Guadalupe, de la cual no se conoce la fecha y que preside actualmente el altar mayor.
5.-NOTAS Y BIBLIOGRAFIA
1).- GONZALEZ Sánchez, José. Crónicas de Asientos. Ed. Jus. México, 1965.
p.49-51
2).- GOMEZ Serrano, Jesús. Aguascalientes: Imperio de los Guggenheim, (Estudio sobre la minería y metalurgia en Aguascalientes 1890-1930. El caso Guggenheim-Asarco). SEP/FCE, México, 1982. p.131-224.
3).- GONZALEZ Sánchez, José. Op. cit. p.85-94.
4).- BERNAL Sánchez, Jesús. Apuntes Históricos, Geográficos y Estadísticos del Estado de Aguascalientes. Imprenta Pedroza. Aguascalientes, 1928. p.358.
5).- GONZALEZ Sánchez, José. Op. Cit. p.85-94.
GONZALEZ, Agustín R. Historia del Estado de Aguascalientes. Ed. Francisco Antúnez. Aguascalientes, 1974.
GURRIA Lacroix, Jorge. La minería, señuelo de conquistas y fundaciones en el siglo XVI novohispano. En la minería en México. Estudios sobre su desarrollo histórico. UNAM. México, 1978.
TOPETE del Valle, Alejandro. Aguascalientes. Guía para visitar la Ciudad y el Estado. Ed. del autor. Aguascalientes, 1973.
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
Nuestra Señora de Guadalupe (Santuario de Guadalupe)